Prisión perpetua a un hombre que mató a golpes a su hija de un mes en Mendoza

Un hombre fue condenado a prisión perpetua por el crimen de su hija de un mes, que murió en agosto de 2014 luego de haber sido golpeada, en el departamento mendocino de Lavalle, informaron fuentes Judiciales. El fallo de la Séptima Cámara del Crimen, que se dio a conocer hoy luego de un extenso debate, recayó sobre Angel Gabriel Villegas (22) a quien le atribuyeron el "homicidio agravado por el vínculo en concurso real con lesiones graves, en concurso real por lesiones leves dolosas". En tanto, en la misma sentencia, el tribunal dictó para Fernanda Páez (22), la madre de la beba, la absolución por ser "víctima de violencia de genero" del condenado.

La víctima, llamada Ludmila, fue llevada por la pareja el 7 de agosto de 2014 al Hospital Sicolli, en el departamento de Lavalle, cuyos médicos constataron que había muerto por un fuerte golpe en la cabeza. Ante la sospecha de que la beba había sido víctima de un maltrato dieron aviso a la Policía,la que inmediatamente detuvo a la pareja. Luego, la fiscalía les tomó declaración y allí manifestaron que el bebé se había caído del cochecito pero la autopsia estableció que murió por una hemorragia cerebral masiva, producto de un golpe con un elemento contundente.

La pareja llegó al juicio acusada de "homicidio agravado por el vínculo en concurso real con homicidio agravado por alevosía y por lesiones dolosas" pero el Tribunal consideró la absolución de la mujer por ser víctima también del único condenado. Villegas quien recibió la pena de prisión perpetua se declaró inocente ante los periodistas, luego de escuchar la sentencia del Tribunal y cuando era trasladado para cumplir su condena. "Esto es una injusticia, yo soy el padre de la criatura, estaba trabajando cuando ocurrió el hecho, no sé qué pasó, yo la lleve al hospital cuando llegué", manifestó.

La pareja en el 2013, un año antes de la muerte de Ludmila, había sido acusada por maltrato hacia otro hijo menor, que debió ser internado porque presentó quemaduras de cigarrillo y una fractura en uno sus brazos. Páez y Villegas fueron imputados en aquel entonces por "lesiones leves" pero al poco tiempo recuperaron la libertad por ser un delito excarcelable.