El hijo de un intendente se suicidó en Entre Ríos

Un hijo del intendente de la localidad entrerriana de Estación Yeruá, quien estaba preso por el femicidio de su ex pareja asesinada a puñaladas frente a su hija, fue encontrado ahorcado en su celda de la cárcel de Concordia y se investiga si se trató de un suicidio o si fue un crimen producto de una discusión con otros presos.

Emanuel Zubizarreta (31), hijo del intendente de Estación Yeruá, Pedro Zubizarreta, una localidad de 1.700 habitantes situada a unos 37 kilómetros al sudoeste de la ciudad de Concordia, en el noreste entrerriano estaba detenido en la Unidad Penal 3 de Concordia, donde cumplía prisión preventiva por el crimen de su ex pareja, Florencia Mohr (21).

De acuerdo a las fuentes, el personal policial de la comisaría 2 concurrió ayer a la mencionada cárcel alertado los presos de la unidad, que se encontraban pidiendo ayuda porque un hombre estaba intentando ahorcarse en una celda del pabellón 5. Tras llegar al lugar, los efectivos comprobaron que Zubizarreta estaba muerto, semi parado y con un alambre fino alrededor de su cuello.

La muerte de Zubizarreta, que estaba alojado junto a otros siete hombres en ese sector del penal destinado a procesados, fue comunicada al fiscal en turno. Entonces se dispusieron las primeras actuaciones para determinar si se trató efectivamente de un suicidio, como aseguraron sus compañeros de celda, o si fue un asesinato.

El subjefe de Departamental Concordia de la Policía entrerriana, comisario Enrique Querencio, reconoció que existen fuertes presunciones de que la muerte de Zubizarreta se debió a una decisión personal. "Todo apunta a que fue un suicidio", manifestó el efectivo a la prensa. Sin embargo, no descartó ninguna hipótesis, afirmando que se van a "agotar todas las tareas investigativas".

Zubizarreta estaba procesado por el femicidio de Mohr, cometido el 2 de febrero y por el cual fue detenido cuatro días después. De acuerdo a la pesquisa, cometió el crimen durante una fuerte discusión que se originó cuando ambos tomaban mate en el negocio que la joven atendía y delante de la hija de ambos, de cinco años. La autopsia que se realizó al cuerpo de Morh reveló numerosas heridas de arma blanca en el torso, espalda y brazos, que le ocasionaron la muerte en forma casi instantánea.

Tras el crimen, el acusado se produjo profundos cortes en ambas muñecas con aparentes intenciones de suicidarse y luego se dirigió a la casa de su padre, a quien le relató lo sucedido. El jefe comunal trasladó a su hijo hasta el hospital Delicia Concepción Masvernat,de Concordia, y luego formuló la denuncia de lo ocurrido ante las autoridades policiales. En la escena del crimen los peritos secuestraron una cuchilla de grandes dimensiones empleada en el ataque.