Un taxista mató a un pasajero y lo dejaron libre por “legítima defensa”

Un taxista mató de una puñalada en el pecho a un presunto asaltante en el barrio porteño de Barracas y ayer fue excarcelado, ya que para la Justicia se trató de un caso de legítima defensa, informaron fuentes policiales y judiciales.

Se trata del chofer Luis Ernesto Cárdenas (60), de nacionalidad uruguaya y quien ayer por la tarde, luego de ser indagado por el delito de “homicidio” por el juez de Instrucción 13 de Capital Federal, Luis Zelaya, fue beneficiado con “falta de mérito” y recuperó la libertad.

El taxista había sido detenido el domingo pasado, alrededor de las 4 de la madrugada, en la calle Paracas al 300, por personal de la comisaría 28ª de la Policía Federal, que fue alertado por el propio acusado que denunció que acababa de ser atacado con un cuchillo por un pasajero, a quien desarmó y apuñaló.

Según las fuentes, los efectivos encontraron al supuesto pasajero tendido en la vereda, a la altura del numeral 377, con una herida de arma blanca en el pecho, por lo que convocaron al Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME).

Pero cuando la ambulancia arribó luego al lugar del hecho, los médicos constataron que el herido, identificado por la Policía como Fernando Alonso de Celada (62), ya estaba muerto.

Las fuentes señalaron que el taxista también presentaba cortes en el arco superciliar derecho y en la nariz, por lo que fue derivado al Hospital Penna con custodia policial, al tiempo que los peritos secuestraron su Chevrolet Aveo, que había quedado detenido tras chocar contra un paredón al momento del asalto.

Tras quedar aprehendido, el taxista fue llevado a los tribunales, donde prestó declaración indagatoria ante el juez Zelaya, a quien le dio su versión de los hechos y reiteró que él actuó en legítima defensa.

Un vocero judicial explicó que el acusado contó que Alonso de Celada abordó el taxi en la zona de Congreso y que al llegar a Barracas extrajo un cuchillo y lo atacó por la espalda con fines de robo.

En esas circunstancias fue que el chofer resultó cortado, lo que produjo que perdiera el control del auto y colisionara contra un muro, a raíz de lo cual detuvo la marcha.

Siempre de acuerdo a la versión del acusado, al detenerse el taxi, ambos hombres descendieron del mismo, se trabaron en lucha, cayeron al piso y en ese momento, Alonso de Celada recibió la puñalada en el pecho, que le provocó la muerte.

Luego de la indagatoria, el juez Zelaya resolvió excarcelar al taxista, mientras aguarda evacuar las citas del acusado y recibir los resultados de distintas diligencias, entre ellas, la autopsia y las imágenes de las cámaras de seguridad que, al parecer, captaron todo el recorrido.