Susana conquistó a todos: ganó el rating y anduvo a los besos con Ramsés

Y una noche, Susana Giménez volvió a la televisión: la diva de los teléfonos pasó el 2015 entre el teatro y el disfrute, alejada de un medio que cada vez la estresa más, pero este año decidió regresar para dar un último adiós al medio que la vio convertirse en parte del firmamento artístico argentino.

Y lo hizo con gran éxito: porque en una noche cargada de opciones, con el regreso de Jorge Lanata y su “Periodismo para todos” y la entrevista de Navarro a Cristina Fernández en C5N, fue la gran ganadora, arrancando la noche con 21 puntos de rating y terminó con picos de 27, liderando a pesar de la fuerte competencia, y demostrando que el público no sólo vive de debate político.

Su arrancó con su “big show” a lo Tinelli: con una mega apertura colmada de figuras donde Su sacó a relucir su veta de comediante que muestra en los sketchs cada año (ver aparte).

NOCHE DE GALANES

En la noche en que la diva regresó con sus habituales concursos y se reencontró en el living con La Abuela, Susana le sacó jugo de entrada a la novela furor de Telefé, “Moisés y los diez mandamientos”, y presentó rápido a los invitados principales de la velada: Sergio Marone y Guilherme Winter, protagonistas del culebrón egipcio, emergieron y se prendieron en todos los juegos que propuso la diva, calentando la pantalla mientras Lanata y Navarro todavía seguían al aire. “¡Que los tiren a la hinchada!”, coreó de entrada la platea femenina, y Guilherme amagó con tirarse, entre risas.

Simpatiquísimos, coquetearon con la diva, a quien le dijeron ante un problema de iluminación que “usted es la luz”, y también coquetearon con las argentinas: Guilherme contó que está en pareja, pero Sergio dijo que “estoy soltero, espero encontrar novia en Argentina, me gustan mucho las argentinas”. “¡Que lo tiren a la hinchada!”, volvió a corear la platea. Luego, el galán contaría que “no creo en la institución del matrimonio”. “Yo tampoco”, respondería Susana. El coqueteo entre ambos terminaría con un tremendo beso de Ramsés a la diva, y con un pedido de WhatsApp. Para despedirlos, además, la diva aprovecharía para besar a ambos...

En medio de tanto “chichoneo”, los protagonistas de “Moisés” analizaron el fenómeno de la novela furor en argentina, en un español más que aceptable, y hubo tiempo para repasar algunas historias de vida de los galanes: Sergio contó que de niño tenía sobrepeso, pero que desde que se convirtió en actor sigue un riguroso método de entrenamiento que requiere que se levante a las 5 de la mañana para hacer actividad física. Allí, el secreto de los increíbles abdominales que conquistaron a Naomi Campbell.

Winter, en tanto, develó su faceta de cantante, que dejó para ser actor, y entonó junto a Sergio el clásico “Susana” de Fausto Minho, acompañado por su guitarra criolla y en honor a la diva: “Susana, soy loco por voce”, le dedicaron.

Susana, siempre hiperbólica, le dijo entonces que tocaba como los dioses: “Ah, muy generosa... ¡Mentirosa!”, disparó Guilherme, que contó que también es artista.

Sergio también reveló sus hobbies: “Juego o basquet y cocino como ningueim: hago huevo frito como nadie”, proclamó, para ser nuevamente ovacionado, antes de contar que diseña anteojos en el marco de una campaña para generar conciencia eco. ¡Más perfectos, imposible!