Los Jaguares no pudieron ante el poderío de los Highlanders

El combinado argentino de rugby Jaguares cayó hoy ante el conjunto neocelandés de Highlanders por  34-8 en cancha de Vélez Sarsfield en su penúltima presentación en  el Super Rugby.    

Ante el campeón defensor, el equipo argentino sufrió su caída  más amplia como local. No realizó una labor tan floja en el primer tiempo, pero se vio superado claramente en el segundo.    

El elenco de Raúl Pérez volvió a cometer errores en defensa,  falló en el line y se vio doblegado en la zona de contacto. Y a  partir de ello comenzó a perder un partido que lo tuvo abajo en el  marcador desde el mismo principio.    

Facundo Isa fue el mejor jugador del conjunto de camiseta naranja y negra, que se mantiene en el tercer y penúltimo lugar de la  Conferencia Africa 2, con tres éxitos y once reveses.     

El próximo fin de semana la franquicia nacional recibirá en el Estadio José Amalfitani a los sudafricanos de Lions -el mejor equipo del momento- ante los cuales cerrará su primera aventura en la  competencia más importante de clubes del mundo.    

Highlanders paseó su contundencia por el césped del Amalfitani y en el primer tiempo sacó diferencias con tres tries, uno de ellos -el tercero- de extraordinaria concepción concretado por Elliot  Dixon.    

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Jaguares ofreció resistencia y achicó distancias con una linda conquista de Hernández y un penal de Nicolás Sánchez. Inclusive  tuvo alguna chance más de anotar a través de sus forwards, pero  chocó con la sólida defensa del campeón defensor.   

En el segundo período casi todo fue del elenco neocelandés, que aumentó diferencias con otro try de Dixon que aseguró el  triunfo, el punto bonus y la clasificación para los playoffs.   

Jaguares cometió muchos errores de manejo, falló mucho en el line y casi no generó situaciones en campo ajeno. Recién en el final lograron meter en sus 22 metros a los Highlanders, pero chocaron con una defensa sólida y contra su propia impotencia ofensiva,  esa que los privó de conseguir una derrota más digna.