Clausuran un boliche en Abasto y secuestran 1.500 litros de alcohol

El Registro de Comercialización de Bebidas Alcohólicas (REBA), dependiente del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos, clausuró este fin de semana varios locales bailables y bares durante una serie de operativos de control realizados en la Región, más en algunos puntos del Conurbano. En uno de ellos, que está en Abasto, incautaron 1.500 litros de cerveza.

Por cometer infracciones a la Ley de Expendio de alcohol y nocturnidad, varios boliches quedaron con la faja de clausura.

En el marco de los procedimientos realizados las noches del viernes y sábado, el REBA, a cargo de Martín Diago, la información oficial es que se clausuraron los bares Imperio, de 17 entre 70 y 71; La Queimada, en 60 y 26; Lord, de 6 entre 43 y 44; Hispano, en 4 y 51; y Santo Pecado, ubicados en 44 entre 4 y 5.

“En algunos de esos lugares se expendía alcohol fuera del horario permitido por la ley vigente y en otros realizaban actividad bailable sin contar con la habilitación para ello”, explicaron las fuentes, sin discriminar en qué boliches se registró cada irregularidad.

Además de los puntos inspeccionados en el casco urbano, en la localidad de abasto se clausuró la bailanta Mega, situada en ruta 36 y 517.

Fue a raíz de que, aparentemente, en ese recinto “había presencia de menores de edad, prohibido por la Ley 14.050”. Ante esa situación, se incautaron 1500 litros de cerveza, según se informó.

Los operativos se extendieron también al Conurbano, donde hubo clausuras en dos bailantas de José C. Paz, donde también habían menores de edad.

Además, la entrada de personas fuera del horario permitido fue otro motivo de clausura. En este caso, la medida corrió para el bar The One de San Martín.

Se supo que el Registro de Comercialización de Bebidas Alcohólicas continúa realizando los operativos de control e inspección en toda la provincia de Buenos Aires, en el marco de la Ley 14.050 de expendio de bebidas alcohólicas y nocturnidad.

Ese marco legal se aplica no sólo a boliches bailables, sino a cualquiera de los lugares que vendan bebidas alcohólicas en el espacio físico donde funcionan, como ser restaurantes, cantinas, cervecerías, cafeterías y bares.

Según la ley, se admite la entrada de gente hasta las 2 de la madrugada. A las 4.30 se debería interrumpir la venta de alcohol y las actividades deben terminar “a las 5.30, horario que puede extenderse hasta las 6.30 por razones estacionales y/o regionales”.