San Luis, con más fibra que juego, logró ganarle a Alumni

En el marco de la décima fecha del URBA Top 14, San Luis venció a la Asociación Alumni por un ajustado 35-31 y quedó de inmejorable manera para conseguir uno de los tickets a los play off que coronarán al rey del rugby porteño 2016.

Y ayer, en una soleada pero muy fría tarde, el equipo marista supo reaccionar a tiempo para dar vuelta un cotejo, que de manera increíble pasó a perder, luego de estar arriba por un buen margen al final del primer tiempo.

CONTUNDENTE

Porque después del kick off, San Luis demostró porque está donde está; en base a un potente scrum y un aceitado line out, de a poco fue doblegando al albirrojo hasta dejarlo al borde del knock out, porque lo lastimó cada vez que atacó y porque lo sometió a voluntad, desnudando cada error del equipo visitante y transformando cada avance, en puntos: primero con el try a pura guapeza de Guillermo Lawrie y después con el de infaltable Rodrigo Bruni, que sumados a las conversiones y un par de penales de Felipe Campodónico, pusieron la chapa del parcial con 20 a 3, que en definitiva mostró en números lo que había sido la primera parte de un encuentro desparejo.

SE DURMIO Y CASI LO PAGA CARO

Y cuando la gente hacía cuentas, preguntaba por otros resultados y saboreaba otro triunfo cómodo, pasó lo inexplicable; casi como en un extraño hechizo, los equipos intercambiaron roles y se dio otro partido, claro está, uno muy raro y que de casualidad, no terminó en derrota para el quince de Pablo Cáffaro.

Jugado por jugado, Alumni salió a quemar las naves y lo atacó por todos lados al azulgrana, que sintió la presión y lució extrañamente dubitativo y con poca resolución de situaciones complicadas, donde quedó en evidencia cierta falta de lectura ante la situación adversa que se presagiaba.

GOLPE A GOLPE

Y fue todo de Alumni, que en base a la dinámica que le imprimió la pareja de medios comandada por Tomás Passerotti y Tomás Corneille y acompañadas por un par de jugadores como los hermanos Sábato o los Romanini, más un pack de forwards muy picante, transformaron en media hora de juego, una película que para los de nuestra ciudad, era de entretenimiento en una verdadera pesadilla.

Le jugó de todos lados, lo lastimó y le anotó cuatro tries de buena factura dando vuelta una historia que venía para batacazo, porque Alumni no viene bien y encima llegaba con una paliza a cuestas que le había propinado CUBA la semana pasada.

De San Luis poco y nada en un segundo tiempo netamente desfavorable, donde oportunamente pudo anotar un penal por intermedio de Felipe Campodónico y un try de Isidro Martínez. Pero para fortuna de la hinchada azulgrana, quedaba un cartucho más en el bolso marista y una buena jugada entre forwards y backs, se transformó en el try que salvó la ropa y llenó de abrazos a Alan Oubiña, cuando quedaba muy poco para el final.

El pitazo del árbitro Sutton, denostó signos de alivio, pero quedó marcada por la furibunda arenga del capitán de San Luis en la ya clásica ronda final del rugby.

En fin, poco para rescatar de un equipo que a esta altura del campeonato, se le exige mucho más, máxime cuando está un escalón por encima de varios y tiene la clasificación al alcance de la mano.

Ahora llegará un receso de quince días para la ovalada porteña, porque estará la presentación en nuestro país del Rugby Championship y Los Pumas, así que la próxima estación marista será Belgrano en Virrey del Pino, que esperará a San Luis ya clasificado junto a Hindú a los play off.

“HAY MUCHO POR CORREGIR”

Una vez finalizado el partido, el capitán marista Juan Campodónico, rescató el valor del triunfo pero fue muy autocrítico: “Vale el triunfo, pero nos relajamos y pudimos haberlo perdido; hay mucho por corregir en la semana y me quedo con la prueba de carácter que dimos”.

A lo que agregó: “Obviamente estamos contentos por el presente, pero tenemos que madurar en algunas cosas”, aseguró el back en el aire de Rugby Line por la 99.1.