Disfrazados como policías, cometen una entradera y huyen a los tiros

Un delincuente fue detenido ayer tras una persecución y tiroteo en el barrio porteño de Villa Lugano, luego de que junto a dos cómplices disfrazados de policías se llevaron cautivo a un empleado de una constructora, que había retirado 150.000 pesos de un banco de Liniers, informaron fuentes de la fuerza.

El hecho comenzó en Rivadavia y Martiniano Leguizamón, donde un joven de 24 años concurrió a una sucursal del Banco Ciudad en una camioneta Renault Kangoo blanca.

Los voceros dijeron que el cadete de la empresa CIS retiró el efectivo, que estaba destinado al pago quincenal de los empleados.

Al salir de la sucursal, el joven subió al utilitario para dirigirse a la firma en la que trabaja, ubicada en el barrio de Villa Soldati.

Según las fuentes, tras circular dos cuadras, el empleado frenó en un semáforo de Ramón Falcón y Murguiondo, donde dos hombres vestidos con camperas y gorras de la Policía Federal Argentina se identificaron como integrantes de la fuerza.

Los presuntos efectivos ascendieron al rodado y uno de ellos comenzó a manejar, pero un agente de la comisaría 48ª observó una actitud sospechosa e irradió un alerta.

“Me dijeron que habían llamado del banco, me la creí porque ellos trabajaban como si fuesen policías, tenían armas de policía, placa de policía y chaleco de policía”, contó el damnificado.

Personal de esa seccional fue al lugar y empezó una persecución, que culminó en Murguiondo y Castañares, luego de que los asaltantes chocaron contra otra camioneta.

LLUVIA DE BALAS

Los efectivos rodearon a los ocupantes del vehículo sospechoso, pero los delincuentes dijeron ser policías y efectuaron disparos, por lo que se originó un tiroteo.

“En un momento se acerca un móvil y los deja seguir, en el transcurso de dos cuadras el conductor se baja, pero no le da el tiempo y vienen dos patrulleros más, el que manejaba pegó un disparo a la Policía y empezó el tiroteo, hubo como treinta disparos”, relató el joven.

Uno de los asaltantes, de 36 años, fue detenido ileso en el lugar, mientras que el otro ladrón subió a un Renault Fluence gris, que llevaba colocada una baliza, e iba con otro cómplice a bordo.

Los voceros dijeron que posiblemente uno de los delincuentes que escapó sufrió un disparo, por lo que los hospitales fueron alertados sobre la posibilidad que ingrese en las próximas horas un herido de bala.