Secuestro, tiroteo y detenidos en Lomas de Zamora

Un odontólogo fue secuestrado en el partido bonaerense de Lomas de Zamora por cuatro delincuentes armados que se lo llevaron cautivo y exigieron dinero como rescate, pero dos horas después fue liberado por la Policía tras una persecución y tiroteo sobre la avenida General Paz, donde fueron detenidos los sospechosos, informaron hoy fuentes policiales.

"Quedé shockeado, es una situación terrible. La inseguridad me tocó sufrirla a mí en carne propia", afirmó esta mañana a la prensa el odontólogo (47), quien solo dijo llamarse Carlos para proteger su verdadera identidad.

Todo comenzó anoche en el cruce de la calle San Martín, entre Laprida y Boedo, en pleno centro de Lomas de Zamora, cuando el dentista regresaba de su consultorio hacia su casa a bordo de su Audi A5 blanco y fue sorprendido por otro auto que se le cruzó por delante y del cual descendieron varios delincuentes armados.

"En ese momento me cruzaron un auto Peugeot 308 y me encañonaron, me hicieron bajar y subir al asiento trasero de mi auto", recordó Carlos.

Dos de los delincuentes se subieron al vehículo y se lo llevaron cautivo, mientras que los otros dos los seguían a pocos metros en el Peugeot como "campana".

Inmediatamente, los captores comenzaron a efectuar llamadas extorsivas a la familia, exigiendo alrededor de 50.000 dólares como rescate, por lo que los familiares alertaron a la Policía bonaerense lo que estaba ocurriendo.

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"Me hacían llamar a un familiar y después ellos hablaban y le exigían dinero. Querían que fuera rápido el desenlace para poder terminar todo. Pidieron mucho de entrada pero terminaron aceptado mucho menos", explicó.

El profesional precisó, además, que los delincuentes tenían una radio con la frecuencia policial, por lo que sabían que ya los estaban siguiendo.

En ese momento, efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora comenzaron a intervenir junto al fiscal federal de Lomas, Sergio Mola, quien impartió distintas directivas en el marco del protocolo habitual para este tipo de casos.

"Ahí empezó un rally por Camino Negro, pasamos el Puente La Noria para Capital Federal y me cambiaron de auto. Por suerte, este Peugeot pinchó la rueda y me volvieron a pasar al mío, que tiene la alarma satelital, porque sino capaz que aún estoy secuestrado", dijo el hombre.

Como el Audi estaba siendo monitoreado por una empresa de rastreo satelital, los investigadores supieron que se estaban desplazando por la avenida General Paz en sentido hacia el Río de la Plata y que, en cierto momento, retomaron como para regresar nuevamente a provincia.

Por este motivo, se le dio intervención también a la Policía Federal y efectivos de la comisaría 48a. decidieron cortar el tránsito en el cruce de esa avenida con la autopista Riccheri y montar un retén para impedir el paso del vehículo.

El operativo policial generó un caos de tránsito al punto tal que los vehículos quedaron paralizados en las dos manos y los secuestradores con su víctima no pudieron seguir circulando.

Al advertir lo que ocurría, los captores pretendieron escapar por el pasto hacia la colectora y fueron perseguidos por los policías, tras lo cual se inició un tiroteo hasta que finalmente fueron detenidos los sospechosos.

En poder de los detenidos fueron secuestradas tres pistolas marca Bersa calibre 9 milímetros, dos de las cuales pertenecían a personal de la Policía Federal y habían sido robadas este año.

En tanto, el odontólogo secuestrado fue rescatado, cuando aún se hallaba sentado en el asiento trasero de su vehículo, en medio de una crisis nerviosa.

"Yo bajé la cabeza sobre mis piernas porque tenía miedo. Escuchaba los balazos, sentía el olor a pólvora, había gritos. Sentía todo como si fuera en tres dimensiones. Hasta que los detuvieron y me rescataron", dijo.

Los detenidos fueron identificados por las fuentes de la investigación como Miguel Angel Riveros (34), Maximiliano Emanuel Maldonado (21), Daniel Acuña (29) y Carlos Alberto Baez (28), quienes fueron trasladados a la comisaría 48a. y luego derivados a una dependencia de la policía bonaerense.

"A mi me pegaron un par de golpes apenas me subieron al asiento de atrás. Había uno que yo tenía al lado que era más tranquilo, pero otros estaban muy nerviosos, decían que me iban a 'limpiar'. Me querían matar", explicó el odontólogo.

Fuentes judiciales informaron que la Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (Ufese) trabajaba junto al fiscal Mola para intentar establecer si estos cuatro detenidos participaron semanas atrás de otros secuestros similares cometidos en la zona sur del conurbano bonaerense.