El antecedente de “la besada” en Meridiano V

La discriminación en un bar por la orientación sexual también alcanzó estado público en nuestra ciudad cuando en diciembre de 2013 María Belén y Agustina, dos chicas platenses, denunciaron que fueron echadas de un local de 17 y 71 por besarse en público. Sin embargo aquella vez, como ahora, la situación encontró argumentos opuestos, ya que los responsables del lugar remarcaron que hubo “algo más que un beso” y que sólo les pidieron que cambiaran de actitud.

En definitiva, “sencillas demostraciones de amor” o “escenas subidas de tono”, según quién relatara el episodio, los besos entre Agustina y Belén motivaron la conovocatoria -motorizada a través de la red social Facebook- a una “besada contra la heteronorma”, la que se concretó pocos días después, y en la que se besaron no solo María Belén y Agustina, sino muchas otras parejas homosexuales que las acompañaron.

En aquella oportunidad, también había intervenido el Inadi. La delegación local del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo expresó su “preocupación” por la denuncia de las jóvenes estudiantes platenses que acudieron al organismo en procura de asesoramiento.

Los cruces entre la pareja de chicas y los responsables del bar de 17 y 71, se iniciaron en el mismo momento en que ocurrieron los hechos. Según narraron las dos mujeres, el encargado del local les manifestó que debían retirarse tras verlas besarse en público.

“Nos dio a entender claramente que debíamos dejar de manifestar nuestro amor, o de lo contrario retirarnos del bar”, relataron.

Por su parte, desde el local en cuestión del barrio Meridiano V se subrayó que “aquí no se echa a nadie” y que “fue bastante más que un beso lo que ocurrió, aunque el bar es un lugar que jamás discriminó a nadie”.

Todo muy parecido, en definitiva, a lo que acaba de ocurrir en el porteño “La Biela”.