Encañonan a dos empleados para asaltar un mayorista de golosinas

Varios casos violentos en los últimos días volvieron a situar a Los Hornos en el podio entre las zonas con más delincuencia. La tendencia no es novedad y hasta hay vecinos que reconocen a los ladrones como gente del barrio. Pero nada de eso hace que la situación cambie.

Sin ir más lejos, ayer se conocieron dos casos distintos pero similares a la vez: a una chica la encañonaron en el pecho y a un muchacho le partieron un botellazo en la cabeza para asaltarlo. La noticia hoy volvió a ser en un comercio, en una esquina por demás transitada.

Eran aproximadamente las 15 del martes cuando dos hombres frenaron justo delante de un mayorista de comestibles en 60 y 143. Andaban a cara destapada y a bordo de una moto Honda Tornado 200. Su apariencia, al menos de comienzo, no le despertó sospechas al dueño del negocio.

Sin embargo todo cambió en un segundo, cuando uno de ellos entró de manera violenta, sacó un arma y le apuntó al encargado y a su hermano. Así empezó a pedir los “billetes violetas”.

Ninguna de las dos víctimas se resistió a la maniobra y el delincuente pudo apoderarse de los tres mil pesos que había en la caja y de las pertenencias que uno de ellos tenía en un bolso.

La situación fue tensa en todo momento, pero no hubo golpes ni encierro para los hombres amenazados. Al cabo de un minuto, el ladrón salió y junto con su cómplice se escapó rumbo a 59 por 143.

Esta fue la segunda vez que los asaltan en poco más de un mes. En aquel antecedente, más violento, se llevaron la plata de la caja, algo de mercadería y las pertenencias de cinco clientes. Todo se concretó luego de que simularan -sin convencer a nadie- que iban a hacer una compra.

“Esto es cosa de todos los días. Sobre todo en la calle, siempre le roban a alguien. Y muchas veces los ladrones son de la zona”, lanzaron en ese mayorista. Las víctimas accedieron a hablar con EL DIA pero pidieron reserva de su identidad.

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En otra esquina emblemática de Los Hornos, 60 y 137, el martes a la mañana un joven apareció con un corte al costado de la cabeza: lo habían abordado dos delincuentes para sacarle sus pertenencias y él se resistió.

Entonces, los ladrones le partieron una botella en la cabeza. El joven terminó hospitalizado y los asaltantes, demorados, luego de una ronda policial por la zona.

Ese mismo día pero a las 15, dos motochorros completaron otro asalto, en el que encañonaron en el pecho a una joven para llevarse la plata de una verdulería de 60 y 150. La tendencia volvió a instalar la preocupación.