Romero: tensión y expectativa por el desalojo de terrenos usurpados

Cada vez más pobladas por familias que se niegan a abandonarlas, en torno a las tierras que se extienden entre las calles 526, 528, 159 y 161 de Melchor Romero crecen, por estas horas, la tensión y la expectativa ante el inminente desalojo.

Esta semana, a más de tres meses de que se iniciara la ocupación, el proceso judicial decantó finalmente, y tras varias idas y venidas, en una orden para que las personas que desembarcaron en junio pasado y se radicaron ilegalmente sean desplazadas de esos terrenos. La decisión, como adelantó este medio en su anterior edición, la tomó el juez César Melazo, al considerar que se “han cumplimentado una serie de requisitos que el denunciante aportó luego de presentarse como particular damnificado”.

Lo cierto es que si bien el magistrado ya dio vía libre para avanzar con el desalojo, es el fiscal que interviene en la causa, Marcelo Martini, quien quedó a cargo de instrumentar la desocupación del predio.

Según trascendió por fuentes policiales, los ocupantes de los terrenos ya fueron notificados de la orden judicial y se les puso al tanto de que deberán dejar las tierras. De lo contrario, indicaron, el desalojo podría producirse en las próximas horas.

Se da por descontado de que participaría personal de la comisaría 14º de Melchor Romero, aunque también trascendió que actuarían integrantes de las divisiones de Infantería y Caballería.

En tanto que, ante la noticia de que la orden de desalojo estaba efectiva, se supo que algunos sectores se estaban organizando para resistir la desocupación de los lotes, que son de propiedad privada.

Ayer en torno a las tierras que se extienden en cercanías al arroyo El Gato el escenario era de tensa calma. No se veían policías. Y varios ocupantes seguían levantando las casillas de madera, como si el desalojo no hubiera sido ordenado.

Mientras, los vecinos esperan que la Justicia actúe, ya que, según denuncian, desde que desembarcaron los usurpadores los servicios de la zona empezaron a fallar y prácticamente no pasa un día sin que haya estruendos, peleas y amenazas.

Vale recordar que en el marco de esta causa hay un albañil paraguayo de veinte años detenido, acusado de intentar vender terrenos usurpados. Su detención fue solicitada por el fiscal Alvaro Garganta y concedida por el juez de garantías Guillermo Atencio.

Además se investiga el grado de vinculación de un segundo demorado con el intento de estafa, aunque en su caso ya recuperó la libertad.

La ocupación se inició en junio y para inicios de septiembre, varias de las parcelas usurpadas se ofrecían en sitios de Internet a precios que oscilan entre los $15 mil y $30 mil, lo que dio lugar a la celada policial que terminó con la captura de los sospechosos.

Como este diario ha reflejado, una situación muy parecida se vive en los terrenos que fueron usurpados en calle 159 a 161 y de 524 a 523, cuyos propietarios esperan que la actuación judicial desemboque pronto en una orden para desalojar el predio.