El 71% de los asistentes dice consumir sustancias psicoactivas

Una encuesta realizada en 2014 por el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires sobre consumo de sustancias psicoactivas en fiestas electrónicas masivas indicó que la mayoría de los asistentes a este tipo de evento (71% de los entrevistados) reconocían consumir algún tipo de sustancia psicoactiva durante la fiesta y que su principal estrategia para evitar inconvenientes era “el autocuidado”.

Según la encuesta, el 71% de los entrevistados (75% de varones y 65% de mujeres) indicó que había consumido sustancias psicoactivas o pensaba consumirlas durante el evento.

El trabajo indicaba, a su vez, que la prevalencia aumentaba en aquellos asistentes que ya habían participado de festivales de música electrónica.

sustancias

Otro dato que reveló el trabajo es que las sustancias consumidas o por consumir eran alcohol (61%), bebidas energizantes (43%), marihuana (36%), éxtasis (26%) y en menor medida LSD y otras drogas (como cocaína, anfetaminas o ketamina).

El 53% de los entrevistados reconoció que las había consumido o pensaba consumirlas en forma combinada.

En el marco de la encuesta, el 77% de los consultados que respondieron que habían consumido o pensaban consumir sustancias psicoactivas durante la fiesta manifestó tener estrategias consideras por ellos como “de autocuidado”.

Así, el 29% dijo tener autocontrol y conocer los propios límites; el 23% dijo que se mantendría hidratado y el 16% dijo que espaciaría los distintos consumos. El resto no supo precisar cuál sería esa estrategia.

Algunos especialistas consideran el ejemplo de algunos países que hicieron punta en materia de prevención en este tipo de fiestas,

Una medida que consideran posible en ese sentido es conseguir un espacio dentro de las fiestas donde las personas reciban consejos y advertencias sobre el uso y la combinación de sustancias.

Entre esas recomendaciones se pueden mencionar la de no mezclar éxtasis con alcohol, mantenerse hidratado, esperar hora y media antes de tomar otra pastilla porque la anterior “no pegó” y otras medidas que pueden evitar una situación de emergncia.

En esos mismo espacios, como ya se hace en Uruguay, España, Holanda, Suiza, Alemania y Polonia, entre otros países, se puede realizar testeos rápidos para saber que hay en la pastilla.

Si la persona sabe que no hay MDMA, el principio psicoactivo del éxtasis, puede elegir tirarla, sugieren.

Uno de los principios de la reducción de daños es empezar por lo que le sirve a quien utiliza drogas. El testeo sirve y también permite realizar mapas sobre las sustancias que estás circulando.

Esta es una manera de prevenir sobredosis y de tomar contacto a través de un servicio, se sugieren.

el mito de las drogas seguras

Con todo, para algunos toxicólogos el problema es más profundo. Destacan, en ese sentido, que entre los consumidores de drogas de diseño se instaló la idea de que se trata de sustancias inocuas o “drogas seguras” que no producen daños a la salud.

Para la toxicóloga platense Ana Girardelli, eso no es real y las drogas de diseño no sólo pueden provocar situaciones potencialmente letales en personas con enfermedades cardíacas no declaradas y en aquellas que las combinan con otras sustancias como la cocaína y el alcohol. También pueden generar daños crónicos en la memoria y en la vida emocional de quienes las utilizan de manera frecuente.