Discutió con su mujer, zafó de la policía y la mató de 15 puñaladas

Una mujer fue asesinada de 15 puñaladas en el abdomen en la ciudad bonaerense de Benavídez: por el femicidio fue detenido su marido quien, según los vecinos, había evitado ser capturado por la Policía minutos antes del crimen.

El hecho se registró pasada la medianoche de ayer en una vivienda ubicada en esa ciudad del partido de Tigre, donde vivían Elizabet Alvez de Olivera (53), su marido, identificado como Juan Daniel Herrera (52) y los dos hijos del matrimonio.

Todo había comenzado alrededor de las 21, cuando el hombre le había dicho a su mujer que la iba a matar a ella y a toda su familia, después de haber mantenido una discusión tanto con su esposa como con los jóvenes.

Entonces, Elizabet, debido al temor que le produjo la amenaza, decidió irse con el menor de sus hijos a la casa de su hermana, que había sido incluida en las amenazas. El mayor, de 19, se retiró del domicilio por su cuenta.

Cerca de la medianoche, la mujer decidió regresar a su vivienda para cerrarla y allí se generó una nueva discusión con su marido. Allí fue cuando él le provocó alrededor de 15 heridas que luego le causaron la muerte, con un elemento punzante.

Según indicaron las fuentes, el hijo mayor escuchó esta nueva discusión. Cuando fue a ver qué había pasado, vio a su padre escapando a gran velocidad en una bicicleta negra y encontró a su madre herida de gravedad en el suelo.

El joven llamó al 911, desde donde enviaron un patrullero y una ambulancia al domicilio. El médico que revisó el cuerpo de la mujer indicó que había sido asesinada de 15 puñaladas en el abdomen y que las heridas que presentaba eran de un tamaño pequeño.

Además, a raíz de esa primera inspección del cadáver, los investigadores presumen que se trató de un arma blanca chica, pero hasta ayer a la tarde no se había incautado ningún elemento relacionado en el domicilio.

“con esto la voy a matar”

Mirtha, una vecina del barrio, comentó en diálogo con la prensa que antes del asesinato ya se escuchaba la pelea proveniente de la casa, por lo que llamó a la Policía para que se acercaran y detuvieran al hombre.

“Es un tipo que muchísimas veces la maltrató, los vecinos lo sabíamos, él siempre le pegaba”, dijo la mujer, y explicó que los efectivos fueron “instantáneamente” a la vivienda “para llevárselo, pero no lo hicieron”.

Además, dijo que en la zona los vecinos no pueden “creer lo que le hizo”, y denunció “a los policías que vinieron a buscarlo y no se lo llevaron”, preguntándose “por qué esperaron que pase esto” para detenerlo y “por qué no actuaron si vieron que estaba mal”.

Por su parte, la hermana de la víctima coincidió con esa versión y dijo a los medios que Herrera había ido a su casa “hacía quince días” y que en esa oportunidad le mostró “un fierrito, como para sacar las gomas” de vehículos.

“Me dijo ‘con esto la voy a matar’, y con eso la mató”, se lamentó, y agregó: “Le dio por todo el cuerpo, como a un animal, y dejó sin madre a los chicos”.

Herrera fue finalmente aprehendido en una gomería de Garín, partido de Escobar, donde trabajaba, según dijo en sus primeras declaraciones, aunque testigos dijeron que era cartonero.