El Sub 20 ya está en Quito para prolongar el sueño mundialista

El seleccionado argentino Sub 20 cumplió ayer su último entrenamiento en la ciudad de Ibarra, antes de emprender viaje rumbo a Quito, capital de Ecuador y sede del Hexagonal final del Campeonato Sudamericano, con el objetivo de conseguir uno de los cuatro pasajes rumbo al Mundial de la categoría, que se jugará en Corea del Sur del 20 de mayo al 11 de junio próximo.

El DT del plantel, Claudio Ubeda, dispuso un entrenamiento de fútbol reducido de baja intensidad en el estadio “Profesor Juan Yepes”, luego del empate sin goles de anoche frente a Venezuela, que selló la clasificación a la siguiente fase como segundo del Grupo B.

Los juveniles argentinos se hospedan desde anoche en Quito para iniciar la preparación del primer compromiso correspondiente al Hexagonal final, frente a Uruguay, previsto el próximo lunes desde las 20:15 en el estadio Olímpico Atahualpa.

Para el clásico rioplatense, Ubeda no podrá contar con dos jugadores importantes: el defensor de Belgrano Cristian Romero, expulsado ante Venezuela por segunda vez en el torneo, y el delantero de San Lorenzo Tomás Conechny, que llegó al límite de amonestaciones.

Argentina, máximo campeón mundial de la categoría con seis títulos (1979, 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007) intentará quedarse con uno de los cuatro boletos mundialistas, al igual que Brasil, Ecuador, Uruguay, Venezuela y Colombia, los otros cinco seleccionados que participarán de la fase final del certamen continental.

Los juveniles argentinos se clasificaron en la segunda posición del Grupo B con seis unidades, detrás del líder Uruguay que finalizó con ocho puntos y por encima de Venezuela (4), último en acceder a la ronda decisiva.

En el debut, empató 1-1 ante Perú con un gol agónico del delantero de Racing Lautaro Martínez, a los 89 minutos, mientras que en el segundo encuentro igualó 3-3 ante Uruguay con dos tantos del delantero de Boca Marcelo Torres y otro en contra del defensor Agustín Rogel a los 43 minutos de la última etapa.

La tercera presentación fue una prueba de contundencia y poderío ofensivo: 5-1 sobre Bolivia con un nuevo doblete de Torres y otros tantos de Brian Mansilla, Conechny y Lucas Rodríguez.

Por la quinta y última fecha de la primera fase, Argentina igualó sin goles frente a Venezuela y el resultado le permitió a ambos seleccionados pasar de ronda.