Uno de los evadidos de Tolosa cayó tras un robo, fuga y tiroteo

Todavía no eran las cuatro de la tarde y una joven de 27 años estaba dentro de su automóvil, cuando de repente se le apareció un hombre que la amenazó con un arma para que se bajara del coche y se lo diera. La chica hizo la denuncia y un poco más tarde la Policía localizó al vehículo, comenzando una persecución que incluyó un tiroteo y un choque de características espectaculares: el auto robado terminó contra un paredón y un patrullero tumbó un poste de luz.

Si algo le faltaba a esta historia era el remate de saber que el delincuente capturado era uno de los dos presos que habían escapado (al parecer con ayuda) de la comisaría Sexta de Tolosa, el 24 de diciembre pasado.

el robo

Eran las 15.30 de ayer cuando un joven de 26 años se acercó al Renault Clío negro que estaba estacionado en 120 entre 74 y 75 con María Victoria Robeda (27) adentro y le apuntó con un revólver del mismo color que el auto, paralizándola de miedo. Enseguida la sacó del coche por la fuerza y ocupó su lugar al volante, para alejarse rápido de la zona. En el reporte que hizo la comisaría Decimosexta (Villa Ponsati) con la denuncia de la víctima no se menciona la presencia de un segundo sujeto, pero al avistar el rodado en 122 y 68, los policías del Comando de Patrullas observaron que viajaban dos ocupantes. Todavía no está claro dónde se subió el segundo sujeto.

Lo concreto es que después del hecho la víctima pidió ayuda al 911 y se desplegó un operativo cerrojo con personal del Comando y de distintas jurisdicciones, lo que posibilitó que el Clío fuera localizado bastante rápido.

la fuga

En una persecución a toda velocidad, en 122 bis y 68 “se produjo un enfrentamiento armado donde uno de los ladrones, que sería el mismo que hizo los disparos, se dio a la fuga”, explicó un jefe policial. El operativo continuó sin que se reportaran heridos, hasta que en 125 y 19, de la localidad de Berisso, una de las patrullas golpeó al coche robado, desestabilizándolo. Este terminó estrellado contra un paredón de la esquina, mientras que el móvil arrancó un poste de luz y quedó en una posición rara, con dos ruedas sobre la vereda.

En pocos segundos la escena se llenó de policías, que redujeron y esposaron al conductor del Clío, secuestrándole tres teléfonos celulares (dos pertenecientes a la dueña del auto) y la réplica de un arma de fuego, detallaron fuentes oficiales. En el choque el joven sufrió apenas unos golpes, por los que fue revisado en el hospital San Martín. De ahí lo llevaron luego a la Decimosexta, donde anoche esperaban su traslado a una alcaidía.

Le imputaron los delitos de “robo calificado y atentado y resistencia a la autoridad”, que se le suman a los que ya afrontaba cuando estaba alojado en la comisaría de Tolosa, en 1 entre 528 y 529, de donde escapó en la madrugada del 24 de diciembre, junto a otro preso.

El candado de la celda estaba roto, pero no pasó inadvertido que los evadidos tuvieron que atravesar dos puertas para llegar a la calle. Por eso quedó acusado y detenido un policía de la seccional (ver aparte).