Volver al ruedo después del dolor

A pesar de que no se estrenó en la fecha prevista desde un principio, “El otro lado de la cama”, finalmente, tuvo su estreno esta semana en la cartelera marplatense y no fue un estreno más.

La alegría del debut estuvo teñida de emoción por la triste característica que, esta vez, marcó la primera subida a las tablas.

Es que Nico Vázquez, y su familia, todavía no pueden entender la temprana muerte de Santiago (26), hermano menor del actor, quien falleciera semanas atrás en Punta Cana, en donde se encontraba vacacionando.

“No creíamos que íbamos a tener la fuerza para salir a escena. Todavía estoy a punto de desmayarme, pero estábamos muy seguros de nuestro decisión”

Y a pesar de que alguna vez se especuló con la cancelación del espectáculo, lo cierto es que Nico Vázquez decidió seguir adelante y, con fuerzas propias y heredadas, subió al escenario el martes pasado y ofreció la función.

Porque el show, dicen, debe continuar. Pero el dolor, a veces, es más fuerte que las frases hechas.

Lo cierto es que “El otro lado de la cama” estrenó en un teatro colmado, en el que además de amigos y público en general, se encontraba Mirta, mamá de Nico, quien se río y lloró durante el desarrollo de la obra.

Al término del espectáculo, el público alentó a Nico con el clásico “olé, olé...” y el actor y conductor de “Como anillo al dedo” se quebró en llanto.

“Cuando te pasa algo así, se te caen las banderas y las tenés que levantar. Gracias a mi vieja que es una leona que me agarró y me dijo ‘lo tenés que hacer’”, dijo Nico Vázquez, al término de la función estreno en Mar del Plata

Mirando fijo a su madre, le tiró un “te amo vieja”, y ofreció un breve discurso a los espectadores que le ofrecieron todo su apoyo.

“Quiero agradecer a mis amigos, a mi familia que me sostiene y al público agradecerle de por vida, porque no sé como estoy acá todavía. Mejor dicho sí sé, estoy por mi mamá, por mi papá y por mis hermanos. No tuve días fáciles y esto no termina hoy, pero el momento en el que mejor me sentí fue cuando estaba acá arriba”, aseguró el marido de Gime Accardi, también protagonista de la obra, y quien tampoco pudo ocultar sus lágrimas de dolor y tristeza.

“Cuando te pasa algo así, se te caen las banderas y las tenés que levantar. Gracias a mi vieja que es una leona que me agarró y me dijo ‘lo tenés que hacer’ y gracias a la otra leona, la hermana de Santi”, agregó.

LAS PALABRAS DE GIME

“Fue un día de mucha movilización. Un día muy especial. Teníamos muchas ganas de salir y hacer la función y estar bien concentrados porque sino los nervios te ganan”, contó, por su parte, Gimena Accardi, a la salida del teatro.

“El público ardía, aplaudían antes de que se suba el telón y eso se recibe. El cariño de la gente es muy importante para poder seguir. El amor, el cariño, que estén ahí, los aplausos, las risas, las palabras. Y la gente se acerca con un amor incondicional”, continuó.

Además, se refirió a las dudas que tuvieron sobre si volvían o no, tras la muerte de su cuñado.

“No creíamos que íbamos a tener la fuerza para salir a escena. Todavía estoy a punto de desmayarme, pero estábamos muy seguros de nuestro decisión”, dijo.

“Cuando te pasa algo así, se te caen las banderas y las tenés que levantar. Gracias a mi vieja que es una leona que me agarró y me dijo ‘lo tenés que hacer’ y gracias a la otra leona, la hermana de Santi”

“Después e mucho hablar y pensarlo, decidimos que lo mejor era empezar. Empezar era el primer paso. Y así fue. De un día para el otro decidimos volver y nuestros compañeros estaban ahí al pie del cañón”, detalló.

Por último, se refirió a la importancia de este proyecto para ellos, y todo lo que signfica para ellos. “Esta obra es un hijo de Nicolás, es una obra que persigue hace 10 años, que fue en Buenos Aires un éxito arrasador. Algo que nunca imaginamos. Es una obra muy mágica para nosotros. Hemos hecho felices a 100 mil personas en Buenos Aires. Este trabajo es un don, hacer reír al otro, hacer feliz al otro. Un poco Nico me lo dijo ‘es nuestro trabajo hacer reír al otro’. También nosotros necesitamos de esa energía de risa para subirnos a un escenario, sobretodo haciendo una comedia”, concluyó.