Un listado de causas que oscurecen cualquier futuro

El ex ministro de Planificación ,Julio De Vido, no solo está complicado en las dos causas penales en las que se ordenó su desafuero y arresto, sino que en los tribunales de Comodoro Py 2002 avanzan otras investigaciones en su contra.

La causa de Once es la que esta más avanzada. De Vido comenzó a ser juzgado el 27 de septiembre pasado por los delitos de estrago culposo y fraude por no haber controlado los trenes que tenía la concesión TBA. Esta falta de control, según la Justicia, provocó que la mañana del 22 de febrero de 2012 el tren chapa N° 16 de la línea Sarmiento (TBA) chocara con la cabecera del andén 2 de la estación Once, lo que causó la muerte a 51 personas (una de ellas embarazada) y lesiones a cerca de 790. De Vido dice que él no tenía la misión de controlar, sino que ésa era tarea de otros organismos del Estado.

Otra causa por la que De Vido ya espera juicio oral es por la compra de trenes en desuso a España y Portugal, por administración fraudulenta y partícipe necesario de cohecho (coimas). Es la causa por la que fue preso el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime.

El ex ministro de Planificación tiene procesamiento confirmado por asociación ilícita junto a la ex presidenta Cristina Fernández por la concesión de obra pública. Se trata del caso “madre” de la corrupción kirchnerista, que motorizó la diputada Elisa “Lilita” Carrió en 2008. El capítulo de la obra pública investiga los contratos viales que recibió por más de $ 40.000 millones, a través de licitaciones y pagos irregulares.

De Vido y Jaime también tienen procesamientos confirmados por anomalías en las renegociaciones de las concesiones de los ferrocarriles en los gobiernos kirchneristas. A criterio de la justicia, De Vido y Jaime habrían obstaculizaron la renegociación de las concesiones y, de esa manera, contribuyeron a una situación irregular que derivó en un perjuicio para los usuarios, que soportaron un sistema ferroviario en malas condiciones de infraestructura y seguridad.

El caso Skanska es uno de los primeros escándalos de corrupción de la era kirchnerista. Se tiene que resolver su situación procesal. La causa investiga el pago de sobornos a funcionarios kirchneristas para ganar licitaciones en la ampliación de gasoductos en el norte y en el sur del país.

Una denuncia que efectuó el abogado Ricardo Monner Sans en el año 2008, por la compra de una casa que no coincidían con lo declarado por él ni su esposa Alessandra Minnicelli. Estuvo sobreseído varios años pero en 2015 Casación revocó la medida y ordenó seguir investigando. Hubo allanamientos el año pasado, que incluyo un debate sobre el alcance de sus fueros.

En marzo, la Cámara Federal ordenó reabrir una causa contra el ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido en la que se lo investiga por presuntas dádivas al Poder Judicial a raíz de la entrega, a fines de 2015, de computadoras y televisores.

Y se investiga un presunto pago de sobornos vinculados con los siguientes contratos: 1) prórroga del contrato con Pan American Energy (PAE) para la explotación del yacimiento Cerro Dragón (Chubut); y 2) fusión de la petrolera Pan American Energy con la firma china CNOOC. Los retornos habrían sido girados desde una financiera local al JP Morgan de Nueva York.