Postergaron el pedido de preventiva para “Pepito”

El juez de Garantías Pablo Raele le concedió a la fiscal Betina Lacki los 15 días de prórroga que solicitó para definir el pedido de prisión preventiva para José Edgardo Echegaray Biel, alias “Pepito”, principal sospechoso de asesinar de un tiro en la frente a Abril Bogado (12). Fuentes judiciales explicaron que las evidencias que vinculan a Echegaray con el crimen “son muy fuertes”, pero todavía siguen pendientes varios informes periciales, entre ellos el cotejo balístico entre el plomo que mató a la nena y el revólver calibre 38 que le secuestraron a “Pepito” cuando lo detuvieron.

“Hasta ahora coinciden, ambos son calibre 38”, indicó Lacki en ese momento, destacando también que el material que filmaron las cámaras de seguridad de la cuadra del hecho jugó un rol clave para reconstruir lo que pasó en la madrugada del 5 de noviembre en 510 entre 11 y 12.

Por este caso que conmovió al país también está detenido un menor de 17 años, al que ya le dictaron la preventiva como partícipe del delito de “robo calificado en concurso real con homicidio en ocasión de robo”, informaron fuentes judiciales.

Este encuadre legal, que permitiría condenar al adolescente a una pena de entre 15 y 20 años de prisión, es distinto al aplicado a Echegaray, que podría recibir perpetua por “robo calificado, homicidio criminis causa (matar para asegurar el resultado de un delito) y portación de arma de guerra, todos agravados por contar con antecedentes penales y por la participación de un menor”. También le endilgaron el “uso de arma y robo en grado de tentativa” en perjuicio del conductor de un Volkswagen Golf al que quisieron asaltar cuando estaba frente a la casa donde asesinaron a la niña.

El día que lo detuvieron, Echegaray quiso “argumentar” esposado en el suelo: “El tiro se me escapó, no quise matar a nadie.”

Pero ya en ese momento la fiscal contrapuso que las pruebas reunidas en la causa no indican que haya sido accidental; “por el contrario -aseguró- todo indica que eso no pasó y el disparo se utilizó para facilitar la consumación del hecho de robo”. En su indagatoria ante la fiscal, este hombre que tiene varios antecedentes y gozaba de la libertad asistida, prefirió no repetir la versión que había dado ante los policías y se negó a declarar.

Si bien sus dichos ante la Policía no tienen validez judicial, la fiscal aclaró que ella toma “esas palabras como un indicio más de autoría, por el testimonio de aquellas personas presentes en su detención, que lo oyeron decirlas y por el testimonio del personal del Hospital de Gonnet donde estuvo internado (por el tiro que recibió en una pierna al tirotearse con la policía), ante quienes también las dijo”.