San Carlos aguantó y se aferró a un empate que se cotiza en oro

Villa San Carlos se llevó de Vicente López un empate (1-1) con sabor a victoria ante un rival de “peso” en la categoría, y de visitante. El equipo de Berisso, que viene a los tumbos en el torneo, encontró algo de alivio. Si bien aún mantiene una racha negativa que duele (ocho sin ganar, con dos empates y seis derrotas), ayer respondió a las exigencias. No jugó bien, es cierto, pero se las ingenió para complicarle la tarde a un Platense que fue voluntad y empuje, pero que no se le cayó ninguna idea para ganar.

Con este punto, muy importante por cierto, el Celeste cortó una racha de dos derrotas en cadena, y consigue un poco de oxígeno en medio de su delicada situación futbolística.

PEGÓ PRIMERO

San Carlos hizo un primer tiempo ordenado y sobre todo, inteligente. La necesidad de sumar puntos lo obligó a jugar pensando cada movimiento. Porque enfrente estaba Platense, uno de los grandes de la categoría, que llegaba a este compromiso herido por las últimas derrotas y porque no hay nada más complicado que enfrentar a un rival lastimado y hambriento de resultados.

Pero el Calamar fue el que arrancó mejor. Con la movilidad de los volantes y la peligrosidad de los puntas, se mostró más ambicioso y peligroso. Sin embargo, el equipo de Berisso se ordenó muy bien del medio hacia atrás, impuso sacrificio en cada pelota dividida, y arriba, sin ser tan picante, tanto Federico Turienzo como Maximiliano Badell se las ingeniaron para molestar permanentemente a los centrales del Calamar.

El Celeste tuvo algo que Platense pretendió y no supo conseguir: la contundencia. A los 17, Federico Turienzo remató, el arquero Jorge De Olivera dio rebote, Maximiliano Badell capitalizó el rechazo defectuoso y decretó el primer gol de la tarde. Baldazo de agua fría en medio de la caldera.

Platense, herido en su amor propio, se volcó al ataque, con mucha voluntad pero sin profundidad. Y en ese contexto, San Carlos salió mejor parado.

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LO MADRUGÓ

De entrada, nomás, Platense se encontró con un regalito caído del cielo. Ni bien comenzó la parte complementaria (al minuto), Slezack cometió infracción dentro del área. Penal. José Vizcarra (ex Central y Gimnasia) se encargó de la pena máxima, y con disparo a la derecha, puso las cosas en su lugar.

Después, vino el aluvión Calamar y el repliegue peligroso de San Carlos que apostó a la contra. Aguantó todo lo que le tiraron y se aferró a un empate que se festejó en todo Berisso.

Otros resultados, T. Suárez 0, Estudiantes 2; UAI Urquiza 0, Comunicaciones 1 y Barracas 2, San Miguel 2. Hoy, Sacachispas-Atlanta (14:30) y Acassuso-Colegiales (15:30).