A punta de pistola se llevan la plata de la caja de un local de celulares

A media mañana el Centro ya era un hervidero y por la calle 6 entre 49 y 50 el movimiento de autos y peatones era incesante. En ese escenario, los ladrones fueron precisos: asaltaron un local de telefonía celular en un momento en que Lila Belloni, la encargada, quedó momentáneamente sola y sin clientes.

En poco minutos, dos asaltantes amenazaron a la encargada del negocio con un arma y tomaron unos 5 mil pesos de la caja registradora. Su objetivo era llevarse también equipos telefónicos y accesorios, pero desde la calle una comerciante vecina advirtió lo que sucedía y mientras la joven pedía ayuda a los gritos los ladrones dejaron rápidamente la escena.

“Estaba sola porque mi compañero venía dos horas más tarde. Entraron estas dos personas y después de preguntar por una funda para un teléfono se metieron detrás del mostrador y me empujaron hacia el fondo del local”, contó Belloni.

La chica a cargo de la agencia oficial de la empresa de telefonía móvil Movistar apuntó que los delincuentes, de unos 20 y 30 años respectivamente, “estaban tranquilos” pero actuaban rápido. “Pidieron la plata y les indiqué la caja. También me pidieron la llave de las vitrinas donde están los equipos”. Según la encargada, quedaron a mitad de camino: “Cuando agarraron la llave, la chica del local de al lado se dio cuenta de la situación y empezó a pedir ayuda”.

Intentó conseguir auxilio, según contó Belloni, en un vehículo de la Municipalidad parado frente al negocio, donde había un oficial de la Policía. Según contaron en la cuadra, el pedido derivó en un reclamo en fuerte tono. La joven hasta habría abierto la puerta del móvil para apurar la actuación del oficial mientras su colega padecía la escena con los ladrones.

El movimiento en la calle fue percibido por los asaltantes, quienes optaron por huir. Salieron del comercio y ante la vista de todos corrieron por calle 6 hasta 49 y de ahí por 49 hacia 5.

Entonces, la empleada accionó el botón antipánico que funciona en algunos comercios a través de una aplicación en teléfonos celulares. En minutos apareció la Policía.

Según contó Belloni en dos tandas de dos efectivos le pidieron los datos del robo y la descripción de los delincuentes. Quedaba pendiente todavía, a primera hora de la tarde, la realización de la denuncia en la comisaría primera.

Los efectivos que tomaron los primeros datos le recomendaron que se presentara con una copia de las imágenes que tomaron las cámaras de seguridad del comercio.

“Es la primera vez que pasa algo así. Siempre hay chicos merodeando y pueden sacar algo, pero robos de este tipo no habíamos tenido”, indicó Belloni.