Un joven con un tiro en el pecho: la novia, detenida

Las causas se desconocen, pero en la cuadra de 83 entre 14 y 15, donde hace tiempo se edificó una casita de material, todos saben que una pareja de novios protagonizó una fuerte discusión. A él lo encontraron con un tiro en el pecho y a ella muy nerviosa. Al punto que empezaron a interrogarla y, por sus contradicciones, terminó detenida.

El hecho ocurrió cerca de las 06.30 y alteró a todo ese barrio, en Altos de San Lorenzo.

Según los voceros consultados por este diario, Emiliano Gastón Blanco tiene 20 años y su novia, que se llama Milagros Ayelén Rodríguez, 19.

Nadie pudo precisar cómo llegó al chico al Policlínico San Martín, aunque es muy probable que, en medio de la desesperación por su estado de salud, alguien lo haya alcanzado al hospital.

Allí lo localizó personal del Comando de Patrulla La Plata, tras recibir un llamado telefónico desde el centro asistencial, como estipula el protocolo de emergencia.

“Tenía una herida de arma de fuego, posiblemente de calibre 22, con orificio de entrada y no de salida, que debía ser intervenida quirúrgicamente”, explicaron los facultativos a los agentes.

Por eso ahora se aguarda su evolución, aunque el primer informe habla de una situación “delicada”.

Por su parte, cuando se entrevistaron con Rodríguez, primero contó que su novio habría sido blanco de un intento de robo, pero después, siempre de acuerdo a las mismas fuentes, habló de que se le había escapado un balazo manipulando el arma.

En medio de la confusión, también deslizó que hubo una pelea y de que Blanco, fuera de sí, se había pegado el tiro en un hombro “para suicidarse”.

A esa altura de la mañana, cotejando la lesión que presenta la víctima y, los dichos de su pareja, por disposición judicial se ordenó la aprehensión ante la sospecha de que la joven sería la autora del disparo.

En tanto, una comitiva policial se presentó en la finca donde acontecieron los hechos y, tras ser recibidos por la abuela de la sospechosa, se procedió a la incautación de un revólver calibre 22 largo, sin marca ni numeración visible, cuyo origen ahora se investiga.

Con anuencia del fiscal Marcelo Romero entonces, se inició una causa por “tentativa de homicidio doblemente calificado”, en la que tomó intervención personal de la comisaría octava y la DDI local.