Debra Messing, otra famosa que denuncia abuso en el set de filmación

Debra Messing saltó a la fama gracias a su papel en “Will & Grace”, tras lo cual la actriz encadenó una serie de apariciones televisivas importantes coronadas por su desembarco en el drama oscuro de “The Affair”.

Pero antes de ser famosa, la intérprete fue una de las víctimas del poder que ostentan algunas figuras importantes en Hollywood, particularmente los directores, y particularmente en una era donde las mujeres acostumbraban a callar por silencio.

La actriz recordó en este sentido lo mal que la pasó en el rodaje de “Un paseo por las nubes”, dirigida por Alfonso Arau y donde tenía un pequeño papel.

La estrella contó que el director la obligó a desnudarse en el rodaje de una escena, a pesar de que eso no estaba contemplado: “Tu trabajo es desnudarte y recitar tus líneas, ya está. Deberías estar agradecida de tener este papel”, le dijo el director cuando la actriz le preguntó por qué debía sacarse la ropa.

La escena continuó con sordidez. Arau la hizo permanecer largo tiempo desnuda, cubierta sólo por una sábana, que el cineasta mexicano destapaba a su antojo.

“La levantó, escaneó mi cuerpo y luego dejó caer la sábana encima de mí como un pañuelo usado. Se fue sin decir nada”, relató Messing, quien afirmó que el director la mantuvo en esa situación durante todo un día, en el cual no le dirigió la palabra más que para ordenarle “cúbrete el pezón” o “cúbrete el trasero”. O para agredirla: “¡Rápido traigan un cirujano plástico aquí, su nariz está arruinando mi película!”, llegó a decir según Messing el cineasta.

“Me sentí violada”, dijo Messing, para quien “todo fue un juego de poder. Y el objetivo fue degradarme”. Tras semejante trauma, lo único que salió de aquella escena en la cama fue la espalda de Messing...

Las revelaciones de la actriz llegan en el marco de un aumento de las denuncias de este tipo de parte de estrellas de Hollywood que, tras años y envalentonadas por otros testimonios, rompen el silencio. Por ejemplo, la semana pasada, el ex marido de Judy Garland relató que cuando la actriz interpretó a Dorothy en “El Mago de Oz” recibió el abuso constante de sus compañeros de elenco, quienes la manoseaban y levantaban la pollera a pesar de que la actriz apenas tenía 16 años.