Una nueva usurpación en Villa Elvira pone en guardia a los vecinos

La ola de usurpaciones de terrenos que viene acosando a la periferia platense sigue creciendo sin que, por lo visto, nada pueda detenerla.

Ahora el escenario de una ocupación ilegal es el barrio UPCN, en Villa Elvira. Hace una semana que comenzó allí la usurpación de terrenos de propiedad privada, donde ya se realizaron improvisados loteos, se instalaron casillas y hasta hubo quienes se colgaron de la red de energía eléctrica, según denunciaron vecinos de la zona.

Alarmados por la creciente apropiación de las tierras que se extienden por calle 89 de 1 a 3, los frentistas históricamente afincados en el barrio radicaron denuncias en la comisaría octava de La Plata. Sin embargo, en los últimos días la usurpación de los lotes en conflicto siguió creciendo con el desembarco de nuevos ocupantes.

Habitantes del barrio que por temor a sufrir represalias mantuvieron su nombre en reserva, resaltaron que “en este caso la usurpación ni siquiera es por necesidad habitacional”.

Ocurre que, según sostuvieron, quienes se estarían instalando en los lotes “son personas del barrio, con sus propias casas, que están ocupando los lotes de oportunistas”.

Un vecino contó a este medio que aducen “que como se está licitando la traza de la calle 90 (extensión de la ruta 6 hacia el Puerto La Plata), la gente que vive en el asentamiento de 2 y 90 será desplazada. Entonces dicen que sin lugar a dónde ir, se van a venir para estos lotes. De manera que los usurpadores dicen que toman los terrenos “preventivamente”, antes de que lo haga la gente del asentamiento de 2 y 90”.

Según afirmaron los denunciantes, la ocupación tiene dos ejes: uno sobre una plaza barrial en 3 y 89, y otro sobre el sector de 89 entre 1 y 115.

“Un día tres jóvenes tomaron tres terrenos. Nadie hizo nada. Entonces otros aprovecharon y siguieron ocupando los descampados. Ahora ya vemos gente que llega de otros barrios a medida que se va corriendo la voz de lo que está pasando. Primero limpiaron, luego empezaron a lotearlo y ahora hasta hay casillas en las que ya se colgaron de la luz”, dijo uno de los denunciantes.

Explicaron que “por lo que sabemos los terrenos no son fiscales, tienen dueño, pero hasta ahora no se presentó”.

La preocupación vecinal radica tanto en la inseguridad en que podría traducirse esta ocupación de tierras, como “en la depreciación que sufrirán los inmuebles del barrio”.

También les preocupa que la radicación masiva termine por repercutir en la calidad de los servicios básicos que se prestan en la zona, ya que, sostienen, los ocupantes se “enganchan” de las redes “con total impunidad”.

Si bien denunciaron la situación en la comisaría octava, “la Policía se acercó pero no hay ningún tipo de acción, sólo supervisan”, enfatizaron.

Por último reclamaron que las autoridades judiciales tomen urgentes medidas para evitar que la toma continúe creciendo.