Van a la Justicia para liberar la terminal de las líneas Este y 520

Unos 70.000 pasajeros de las líneas Este y 520 siguen haciendo peripecias por la suspensión del servicio que en forma sorpresiva dispuso un grupo de choferes que tomó la terminal de Ruta 11 y 610 por despidos y otros reclamos laborales. Desde la empresa Expreso La Plata recurrieron a la Justicia Penal para liberar el predio cuánto antes.

Transbordos, colectas para viajar en taxi o remis para ir al trabajo o llevar los chicos a la escuela, larguísimas esperas al rayo del sol forman parte de algunos de los trastornos que provocó la protesta a decenas de miles de usuarios, que comenzó el lunes pasado y es por tiempo indeterminado, según ratificaron ayer los choferes en conflicto.

Ayer en el predio se pudo observar a un reducido grupo de choferes entre los micros que fueron estacionados en el ingreso al predio, donde una hicieron una fogata.

Los choferes que estaban ayer en la terminal de la empresa Este y 520 sólo informaron que “la situación está en manos de los abogados que nos representan y los de la empresa”.

Según se pudo saber, hasta el momento no hubo contacto entre los choferes en conflicto con empresarios o el gremio de la Unión Tranviaria Automotor.

Mientras tanto, en las paradas de la avenida 122, numerosos usuarios aguardaban el paso de algún micro de la línea 202 que le permita llegar a 122 y 66 y luego tomar el 214 para ir al centro de la Ciudad. “Más costos, más esperas, y trastornos que padecemos los usuarios, quienes sorpresivamente, otra vez, terminamos siendo rehenes de un conflicto ajeno a nosotros”, dijo Julieta Ramos, una de las usuarias que ayer habló con este diario.

“Hay que tener mucha paciencia. tomamos el 202 para ir a 122 y 66 y ahí esperamos otro micro para llegar al centro de La Plata”

Miriam Almirón
Usuaria de las líneas
Este y 520

El servicio de la línea Este tiene un amplio recorrido por la Ciudad: va desde Ignacio Correas hasta el barrio Hipódromo. Otros ramales también cubren Villa Alba, Villa Montoro, barrio Jardín y un extenso tramo de Villa Elvira.

Un usuario de 122 y 604 dijo que “nosotros tenemos al menos la posibilidad de hacer un transbordo, pero hay otros que directamente tienen que tomar un remis o taxi para ir a trabajar, lo que representa un gasto extra y sorpresivo importante. Nadie defiende a los usuarios, que tenemos que hacer malabares para cumplir con las obligaciones cotidianas”.

Anoche vecinos de 7 y 90 denunciaron que en esa esquina se formó una “parada improvisada” de taxis que levantaban a pasajeros que descendían los micros de la línea 307. “No sabemos porqué no completan el recorrido. Pero bajan a la gente ahí y entonces a las personas mayores o madres con hijos en brazos, que no pueden caminar tantas cuadras, no les queda otra alternativa que subirse a esos taxis”, denunció una vecina. Se trata de una zona -vale aclararlo- fundamentalmente cubierta por micros de línea Este, aunque hay ramales de la 307, por caso, que también cubren algunos recorridos.

El conflicto que comenzó el lunes tuvo un amargo antecedente el año pasado para los usuarios, ya que durante varias semanas se mantuvo un paro que incluyó cortes de ruta, represión policial, usuarios varados, ocupación de la avenida 44 entre 1 y 116 como parador alternativo mientras se mantuvo el conflicto y un violento episodio que desató un paro total de micros en la noche del 2 de noviembre pasado tras una protesta callejera que se desbordó en la avenida 7 a la altura de plaza San Martín,