“Hace mucho que le roban a Mirtha”

El juicio por el robo de las joyas de Mirtha Legrand está en su momento más picante. La audiencia que debía realizarse ayer fue suspendida porque Lina Díaz, ex mucama de la conductora y una de las imputadas en la causa, decidió cambiar de abogado alegando encontrarse “en estado de indefensión” (ver aparte). Tras presentar la notificación correspondiente en Tribunales, la ex empleada realizó resonantes declaraciones a la prensa, en las que insinuó la existencia de una situación irregular en el entorno de la diva de los almuerzos.

Nerviosa, Lina Díaz intentó esquivar a los móviles pero no pudo, y a cuentagotas comenzó a hablar, relatando el drama que atraviesa.

“Es demoledor para una familia escuchar todo lo que dicen”, manifestó, visiblemente incómoda.

Inmediatamente, empezó a tirar “palos” para los Legrand. “Hay gente a la que no le interesa pagarme lo que me debe, y entonces van a inventar cualquier cosa. Supuestamente son muy honestos pero ni siquiera en la AFIP han depositado dinero”, dijo Lina, en relación a los supuestos sueldos adeudados por su servicio.

Y en ese momento llegaron las advertencias. “A mí no me dejan hablar, pero ellos dicen cualquier basura de mi familia. Me siento como un ratón de laboratorio”, remarcó, furiosa.

En tren de confesiones, comenzaron a llegar las declaraciones más sorprendentes. Así, en tono amenazante, advirtió: “Voy a gritar mi verdad. Y tengan cuidado porque mi verdad es pesada”.

En la misma línea, Lina Díaz se explayó: “Hace mucho que le vienen robando a Mirtha. Recorran todos los robos anteriores que tuvo la señora. Yo no entiendo de seguros ni de joyas. Esto es una bomba”.

Intentando terminar con el móvil, le pidió a los medios que “basta de arruinarme y destruirme” y, en lo que podría definirse como un buen gesto hacia su ex jefa, aclaró: “No me van a hacer hablar mal de Mirtha”.

Además, dijo que la conductora televisiva no la despidió. “Yo me fui. Cuando ella se entere porqué, vamos a ver si cambia de opinión”, destacó, sumando más misterio a su versión de ¿complot familiar? contra la diva.

Cansada de la condena social en la que se encuentra sometida desde el 2010, año en el que se perpetuó el famoso robo, Lina dijo que está harta de que todo el mundo la trate como una porquería.

Y volvió a insistir con su inocencia. “Soy una ciudadana honesta y de trabajo. Sería una locura haberle robado a quien me dio trabajo toda la vida. ¿Una persona que dio 20 años la cara en televisión va a salir a robarle a quien le dio trabajo toda la vida? Desde el año 1990 al 2010 estuve en la TV, estaría bien loca si hago algo así. Hace siete años estoy ahogada, no puedo hablar. Ellos hasta pueden hacer chistes con mi vida. Soy una mujer inocente, fui como un ratón de laboratorio, un juguetito”.