Sin luz ni agua, en un hogar de ancianos atraviesan un calvario

Sofocados, debilitados, deprimidos y más vulnerables que nunca, los 40 ancianos que viven en una residencia de Los Hornos atraviesan una prolongada pesadilla por la falta de luz y agua.

Con temperaturas infernales, los cortes de servicio eléctrico que afectan a la Región muestran por estos días su secuela más dramática en la residencia para adultos mayores de 63 entre 153 y 154: ayer contabilizaban 15 días sin suministro y, al no poder usar el ascensor, muchas personas con movilidad reducida se vieron obligadas a quedar prácticamente encerradas en sus habitaciones.

Como la Fundación funciona en un edificio de dos pisos, se suma el trastorno de que los ascensores tampoco andan. “Hay 40 ancianos que tienen entre 85 y 90 años, no los podemos trasladar a otros ambientes porque no anda el ascensor, hay problemas en una de las fases y no podemos ni encenderles el ventilador”, contó Estela Villarreal, trabajadora social de esa institución dirigida por Coca Velazco - 90 -, conocida por ser miembro de Madres de Plaza de Mayo.

Los problemas con la energía eléctrica también ocasionaron inconvenientes con el agua porque tampoco funcionó el motor que la eleva al tanque.

“La residencia está imposible por el calor y la falta de agua, tenemos miedo que las personas se terminen enfermando, algunos ya se ven muy deprimidos con toda esta situación que se prolongó más de lo esperado”, agregó Villarreal.

“Es una cuestión de humanidad, los ancianos no pueden vivir en estas condiciones”, dijo la trabajadora social y agregó: “solo tenemos luz en la cocina y en uno de los ambientes de abajo, pero el ascensor está fuera de funcionamiento y no los podemos hacer bajar por escaleras porque son personas de mucha edad”, señaló la trabajadora social.

El Hogar “Makom” es una fundación sin fines de lucro que ya había vivido una situación similar hace poco más de un año. “No puede ser que nos dejen así abandonados. Estamos perdiendo todos los alimentos de las heladeras y los freezers y no vamos a tener con qué darles de comer”, clamaban entonces.

Esta vez realizaron “muchos reclamos” a Edelap, sin que hasta el momento se interviniera en su reparación.

Desde Edelap señalaron que “la ola de calor sostenida durante varios días, sumada a la alta demanda de las últimas jornadas, aumenta la probabilidad de fallas del sistema de distribución de energía eléctrica, dado que los cableados no puede disipar el calor interno generado en su operación al mantenerse (día y noche) las altas temperaturas en el ambiente”.

“Esto ha provocado interrupciones puntuales, en su gran mayoría, en las redes de baja tensión, donde ha salido de servicio un tramo de la red o una de las fases dejando a un sector acotado o a una manzana sin suministro”.

Explicaron que “en función del comportamiento de la red en dichos sectores se analizará la necesidad de realizar inversiones en los lugares que han evidenciado cortes reiterados en el momento pico de exigencia del sistema, incluido el caso del geriátrico”.