Un instituto de minoridad quedó “a la buena de Dios” por un paro

En un hecho tan insólito como riesgoso, el grupo de asistentes de minoridad que trabaja en el Instituto San Isidro Labrador, situado en Verónica, partido de Punta Indio, adhirió ayer al paro nacional de los gremios docentes y dejaron a los chicos -algunos vinculados a situaciones delictivas y otros asistenciales- sin la guarda de ninguno de los 12 agentes que, por turnos, tiene a cargo la vigilancia. Sólo quedó como único adulto el director de la institución.

“Al sumarse al paro dejaron el instituto sin asistencia y para esta noche -por ayer- podría recién venir una persona a hacer guardia”, denunció, preocupado por la situación, el administrador y asesor pedagógico del establecimiento, Ariel Solé.

La institución aloja a 18 menores y, única de esas características en la localidad, tiene un régimen abierto, es decir, si alguno de los internos decide irse, puede hacerlo. Frente a la emergencia de ayer, las autoridades del instituto convocaron a personas ajenas al lugar pero vinculadas a la orden religiosa de San Isidro Labrador y así dos voluntarios se acercaron al establecimiento y acompañaron a los menores en una improvisada recreación junto al río.

“Mañana -por hoy- va a venir gente de la Iglesia, pero la preocupación es que esto se extienda y que los chicos sigan estando sin los asistentes, que son quienes los cuidan, porque se pueden perder o fugar. Tiene que haber dos asistentes a la mañana y dos a la tarde y ayer no hubo ninguno.

PREOCUPACIÓN

El instituto, que fue fundado en 1947, aloja a jóvenes de entre 12 y 17 años y si bien funciona bajo la órbita estatal, su administración está cedida a la Iglesia.

Como se dijo, la preocupación radica en que, con el paro anunciado para hoy y las posibles medidas de fuerza que podrían adoptar los gremios docentes para continuar su plan de lucha, el instituto quede otra vez sin personal a cargo en los días venideros.