Según enviados del Vaticano “los chicos se enamoran y denuncian por despecho”

"Hay personas despechadas. Por ejemplo, una chica, un chico… se enamora de un sacerdote, y éste no le responde. Tan despechado puede ser el varón como la mujer. Entonces, lo denuncian". En esos términos se refirió uno de los sacerdotes, que forma parte de la Comitiva enviada por el Vaticano a investigar los casos de abusos en el Instituto Provolo, al referirse al origen de las denuncias por ataques sexuales que involucran a miembros de la Iglesia Católica.

Según la mirada del cura Dante Simón muchas de las denuncias por abuso que se radican no son verdaderas y se fundamentan en “despechos” que tienen los denunciantes con los ministros religiosos por “no responder”.  Simón se encuentra desde hace algunas semanas en Mendoza para tratar de echar luz sobre los sucesos ocurridos en el Instituto Antonio Próvolo de Luján de Cuyo. Junto a Juan Martínez encabezan la comisión investigadora. 

La conclusión de los enviados por la Santa Sede fue publicada por el medio de prensa Mendoza Post y corresponde a una entrevsita que ofreció el religioso. En esa nota también explica que pese a haber intentado establecer un canal de comunicación con quienes denuncian abusos tanto las víctimas como sus familiares se han negado. “Esta posición no permite que se pueda avanzar con la causa canónica” sostuvieron.

En este sentido la querella integrada por Sergio Salinas y Oscar Barrera se opuso a que los enviados del Vaticano tuvieran diálogo con los denunciantes y acceso al expediente. En el Próvolo mendocino son más de 60 los ex alumnos que denunciaron haber sido abusados por los curas Nicola Corradi y Horacio Corbacho, el monaguillo Jorge Bordón, los dos empleados administrativos, José Luis Ojeda y Armando Gómez, y la recientemente implicada monja Kumiko Kosaka.

LA ENTREVISTA COMPLETA AL VICARIO 

MENDOZA POST—Hay mucha suspicacia sobre su motivo para acercarse a las víctimas. ¿Qué dice de eso?

DANTE SIMÓN—El centro de la investigación son las personas denunciantes, no los sacerdotes denunciados. Es muy difícil que un denunciado te diga que sí, que es verdad. A no ser que haya una confesión.

MENDOZA POST—¿Sucede eso?

DANTE SIMÓN—Es rarísimo. Lo niegan. Lo niegan o son realmente inocentes. Yo no puedo cerrar mi investigación habiendo escuchado a Corradi y a Corbacho. Sería negligente de mi parte. El centro de la investigación son los denunciantes, los testigos y las pruebas. Finalmente yo tendría que ir a decirles a Corradi y a Corbacho: "¿Qué dice usted de esto?".

MENDOZA POST—¿Qué cree que piensa la querella?

DANTE SIMÓN—No lo sé.

MENDOZA POST—¿Desconfía?

DANTE SIMÓN—Claro, parece que desconfían.

Ante la requisitoria sobre el pedido de la querella, Simón dijo: "La querella ¿hasta qué punto está trabajando por el bien de las víctimas o por su orgullo? Yo podría escuchar a los padres, los padres podrían aportar pericias. No hay que interferir, al menos". Y agregó: "En definitiva, ¿qué estamos haciendo con todo esto? Retrasándoles la justicia a las víctimas. Yo me pongo en el lugar de una víctima. Con toda esa información, yo ya podría haber elaborado un informe y con eso la Iglesia hubiese hablado. Hubiese sido un consuelo para las víctimas y sus padres".

MENDOZA POST—¿Los familiares de las víctimas quieren hablar con usted?

DANTE SIMÓN—No lo sé. Lo sé por boca de la querella.

Sobre las sospechas sobre un posible encubrimiento de la Iglesia, el vicario declaró: "Si la querella sabe que la Iglesia esconde algo, que lo denuncie".

MENDOZA POST—¿Esto estanca la investigación canónica?

DANTE SIMÓN—Por ahora, sí. Pero como la verdad brilla, se abren ventanas. Cuanto más, se suspenderá por un tiempo. Hay que llegar a la verdad. La Iglesia quiere saber si Corradi y Corbacho son culpables o no. Nosotros hemos venido a buscar la verdad. Si duele, que duela. Leer sobre lo que se publica sobre los posibles delitos nos destruye, nos horroriza, nos llena de vergüenza, de dolor.

MENDOZA POST—¿Cuántas causas ha investigado usted?

DANTE SIMÓN—Ocho. Menos una, todas llegaron a Roma. Ahí deciden.

MENDOZA POST—¿Todas de abusos sexuales?

DANTE SIMÓN—Claro. Algunas han sido desestimadas. Porque también hay personas despechadas. Por ejemplo, una chica, un chico… se enamora de un sacerdote, y éste no le responde. Tan despechado puede ser el varón como la mujer. Entonces, lo denuncian. Y como hay que intervenir de oficio, ante la denuncia, hay que intervenir. Entonces muchas causas son desestimadas. La querella dice "los hechos han sucedido y ya están condenados".

Además, el vicario se refirió a la condena de parte de algunos sectores de la sociedad cuando se refirió a Corradi como "padre".

DANTE SIMÓN—Padre Corradi sigue siendo padre. Corrupto, santo, qué sé yo. Hasta que se muera va a ser sacerdote. Nunca va a dejar de serlo.

MENDOZA POST—¿Aun expulsado?

DANTE SIMÓN—Sigue siendo sacerdote, pero expulsado.