Violencia de género, una problemática que suma víctimas todas las semanas

En la calle o en una casa, de día o de noche, la violencia de género volvió a ser un tema preponderante en la agenda policial del fin de semana. Solamente en un puñado de horas, hubo cinco episodios violentos que dejaron como resultado a cuatro hombres y a una mujer arrestadas.

Uno de los más salvajes se dio en el barrio Obrero de Berisso, en plena madrugada de ayer. Eran aproximadamente las 2 cuando un hombre de 40 años llegó hasta la casa de su ex pareja, con la intención evidente de ingresar a ese sitio como fuera.

“Ante la negativa de la mujer de abrirle o de hablarle, el sujeto empezó a atacar el frente de la vivienda con piedras y objetos contundentes”, explicaron voceros policiales.

Esa lluvia de elementos terminó por dañar la fachada de ese domicilio, situado en la manzana 14 de ese complejo barrial berissense, particularmente las ventanas y la puerta.

La víctima, de 34 años, imploró ayuda por teléfono. Marcó el 911 y esperó a que la policía llegara cuanto antes. Una comitiva del CP de esa localidad se apuró en ir. Cuando estuvieron ahí, se encontraron con que el hombre se había escapado, tal vez previendo lo que sucedería.

Los efectivos averiguaron cómo estaba vestido y en qué dirección huyó. Con esa información supieron dónde buscarlo. Enfilaron hacia la avenida Montevideo y en cuestión de instantes lo ubicaron caminando, en la soledad de la madrugada.

Fue en 170 entre 29 y 30 donde los agentes lo alcanzaron y le dieron la voz de alto. El acusado la desobedeció e hizo un último intento por salvarse.

Con la misma actitud agresiva que tuvo con su ex, enfrentó a los policías “con golpes y patadas”. Al final, la maniobra fue neutralizada rápido y lo llevaron demorado a la comisaría Segunda, donde se le abrió un expediente por los cargos de daños y resistencia a la autoridad.

Otra situación de violencia de género expresa se vivió en el centro de la ciudad cuando, según fuentes policiales, era la mitad de la mañana de ayer.

Un hombre de alrededor de 30 años fue visto pegándole a una chica de 27 en la cuadra de 57 entre 11 y 12. La policía fue avisada de esa agresión y fue a tratar de interrumpirla. En ese sitio se encontraron, de nuevo, con que el agresor ya se había escapado de la escena.

Nerviosa, la víctima describió al joven y les marcó a los uniformados el camino para que lo siguieran. Fue a 100 metros, en 57 entre 10 y 11, donde pudieron alcanzarlo e interceptarlo.

No trascendió mucho más de esa secuencia. Aparentemente el acusado no se opuso al procedimiento y fue subido al patrullero en calidad de aprehendido.

En su identificación, trascendió que el imputado por “lesiones en el marco de violencia de género” es un mecánico dental de barrio Norte.

Estos casos más un tercero en Los Hornos (ver recuadro) reconfirman la vigencia de un problema que excede a situaciones y contextos particulares.