Los ex unidos en contra de la cantante

Laura Miller cae cada vez más profundo. Ahora, su ex pareja, el platense Romeo Turrín, a quien había denunciado por violencia de género, una causa de la que fue sobreseído, salió a defenestrarla en la tevé, al acusarla de “macabra” y “siniestra”. Y Nicolás Traut, el automovilista con quien aún está casada, y de quien inició los trámites de divorcio tras haber sido detenido por una presunta estafa al municipio de 25 de Mayo, dijo que nunca le levantó la mano.

Con Turrín, la cantante estuvo en pareja entre 2012 y 2015. Ayer, el platense se sentó en living de “Intrusos” y dijo que la artista “no está bien psicológicamente”. “Ella cuando hace la denuncia y aparece en todos los medios, me empezaron a entrar como 10 ó 12 solicitudes de mujeres en tanga, y era obvio que estaban hechos por ella”, dijo sobre la acusación de violencia de género, y contó también que lo llegó a manipular con un embarazo que nunca existió.

Más tarde, Traut, su todavía marido, pasó por “Pamela a la tarde” y, además de despegarse de la causa judicial, negó que haya sido violento con Miller, y admitió que ella todo el tiempo lo perseguía porque sospechaba que él le era infiel. Esto quedó en claro en la violenta llamada que se filtró la semana pasada.

Paradójicamente, Turrín y Traut se cruzaron en América y accedieron a ofrecer un móvil para “Infama”. En el cruce, el automovilista le pidió perdón al platense, por aquel audio que se viralizó en el que, junto a Miller, se burlan de él, y hasta lo amenazan con “arrancarle la cabeza”. Turrín, aceptó las disculpas, diciendo: “Se que en algún punto pudo haber estado manejado y manipulado por ella, porque a mí me pasó lo mismo”.