Mataron a golpes a una jubilada durante un robo en su casa de Barrio Hipódromo

En medio de una fuerte ola de inseguridad que sacude a toda la Región, una jubilada de 77 años fue encontrada asesinada ayer a golpes en su vivienda de Barrio Hipódromo.

Sucedió en horas de la madrugada, cuando delincuentes ganaron la propiedad, situada en diagonal 114 entre 39 y 40, justo frente a la entrada principal del Hospital Gutiérrez, donde la atacaron con saña.

La mujer se llamaba Elisa Angélica Miquel, quien quedó recostada sobre la cama de su habitación, con la cabeza destrozada y ensangrentada.

Los voceros consultados por este diario indicaron que “también le anudaron un lazo en el cuello, aunque la causal del deceso fueron los golpes”.

La primera en llegar a la terrible escena fue su hija, Patricia Adriana Odello (54), quien descansaba en la parte alta del inmueble.

Según los informantes, escuchó unos ruidos extraños y, al bajar para ver qué pasaba, se topó con su madre moribunda.

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De nada sirvió el posterior arribo de un equipo de emergencias médicas del SAME, ya que, apenas intentaron revisarla, comprobaron que Miquel estaba muerta.

LA CASA REVUELTA

En medio de la conmoción que se vivía en el lugar, sumado a la presencia de una decena de policías, no pasó desapercibido el hecho de que la casa de Miquel estuviera toda revuelta.

Ese detalle brindó una primera señal y orientó a los pesquisas hacia el móvil del brutal asesinato (ver aparte).

Una alta fuente judicial confirmó a EL DIA que a la jubilada “le sacaron plata y dos armas de fuego, una calibre 38, que pertenecían al marido”.

Además encontraron una tablet con el frente roto tirada en el patio del domicilio, por lo que se presume que se le cayó a uno de los autores del asesinato cuando se daba a la fuga.

Una casa en venta situada a la vuelta, sobre la calle 39 entre diagonal 114 y diagonal 80, habría sido la elegida para comenzar el atroz golpe.

Nadie está en condiciones de certificar que el objetivo de los delincuentes era llegar a la vivienda de Miquel, aunque para algunos “la tenían marcada”.

El resto quedará supeditado al resultado de los trabajos periciales, fundamentalmente en la búsqueda de rastros para identifica a sus autores.

En el caso, caratulado “homicidio criminis causa”, tomó intervención la UFI Penal en turno de La Plata, a cargo de Ana María Medina, que convocó a una comitiva de la DDI local para que se haga cargo de todos los rastrillajes.