Asaltaron a golpes a una pareja de quinteros y a su hija de 15 años

Uno de los sectores más golpeados por la inseguridad en la Región sumó ayer un capítulo nuevo, a manos de una banda que aplicó la modalidad de siempre, aunque esta vez fue a fondo con la violencia. Tanto, que hasta castigó a una adolescente de 15 años, quien terminó con politraumatismos en el cráneo, informaron fuentes oficiales.

Este nuevo ataque a productores rurales sucedió cerca de las 22 del viernes en una casa situada en el medio de un terreno arbolado en Olmos, donde cinco sujetos armados sorprendieron a una familia cuando estaba a punto de ingresar en el domicilio.

Lo que sobrevino después fue una andanada de amenazas y golpes, para forzar a las víctimas a entregar lo que la banda había ido a buscar: dinero en efectivo.

Por lo que contó a la Policía Pablo Pimentel, un agricultor de nacionalidad boliviana y 43 años, los bandidos surgieron de entre las sombras cuando él, su esposa Máxima Casimiro (43), y las hijas de los dos llegaron a su propiedad de 90 entre 169 y 170.

Los agresores les cayeron encima, con sus rostros encapuchados y armas que usaron para asustar y castigar.

A Pimentel le “aplicaron varios golpes en la cabeza dejándolo tirado en el umbral de la puerta, mientras ingresaron en la finca con su mujer e hijas”, aportó un jefe policial.

A ellas también las golpearon, mientras pedían a gritos que entregaran la plata. No se sabe cuánto duró el brutal episodio, pero transcurrió en el tiempo que necesitó la banda para apoderarse de 40 mil pesos y dos televisores LCD. Entonces, sí, escaparon.

Lastimados y en shock, los damnificados llamaron al 911 y esperaron a que un patrullero llegara hasta ese escenario, complicado de transitar en días de lluvia.

Pimentel recibió a los policías del Comando con el rostro empapado de sangre, igual que su mujer y una adolescente de 15 años. Para sortear la demora policial, en el mismo móvil los llevaron hasta la Unidad de Pronta Atención (UPA) de Los Hornos.

El médico que los asistió detalló en su parte que el dueño de la propiedad sufrió tres cortes en el cuero cabelludo que demandaron 10 puntos de sutura, mientras que su esposa -con una lesión similar- recibió cuatro puntos y la menor presentó traumatismos varios en el cráneo, informaron fuentes oficiales.

En la comisaría Decimoquinta de Olmos abrieron una causa por “robo calificado y lesiones”, mientras investigan qué conexión pudo tener esta banda con otros ataques similares contra productores agropecuarios de la Región.