Desaparecido

“Están en algún sitio, concertados, desconcertados, sordos, buscándose, buscándonos...” comienza el poema de Mario Benedetti, Desaparecidos.

Así está hoy el joven Santiago Maldonado desde el 1 de agosto pasado... desaparecido...bloqueado por los signos y las dudas, contemplando las verjas de las plazas, los timbres de las puertas, las viejas azoteas...como escribió el poeta uruguayo.

El viernes último se cumplió un mes de su “no aparición”. Y miles de personas en Plaza de Mayo y las plazas de todo el país pidieron por él.

Mientras en el juzgado federal de Esquel, donde se investiga la causa, se suceden las carátulas, las hipótesis y los folios de los expedientes y Santiago no aparece, los violentos esperan su oportunidad.

Nuestra ciudad tuvo una muestra el 24 de agosto último, con ataques a la Casa de Gobierno y el anexo de la Cámara de Senadores provincial. Y posiblemente también el Ministerio de Seguridad. Anteayer se enfrentaron a la policía, apedrearon a manifestantes pacíficos y a periodistas en los alrededores de Plaza de Mayo. En El Bolsón, arrojaron bombas molotov sobre los gendarmes.

Y también están los políticos oportunistas.

Los malos políticos que intentan llevar agua para su molino con un hecho doloroso como este.

Mientras tanto, todos esperan que Santiago Maldonado aparezca. Con vida, claro.