Varios días, mucho silencio

Aunque todo está oscurecido por la sombra del escándalo y la indignación, una de las cosas que más llama la atención es el silencio de los propios alumnos -sobre todo los que integran el Centro de Estudiantes- y el tiempo que pasó entre el hecho y la llegada de la noticia a oídos del rector Zorzoli: más de 20 días. Algunos aseguran que el abuso habría ocurrido durante la noche del 7 o la madrugada del jueves 8 de septiembre. Es más: la chica ya había revelado que fue atacada en un post que escribió una semana después del hecho en un grupo de Facebook integrado por sus compañeros, donde no especificó qué tipo de abuso sufrió. “Fue una situación de mierda y una experiencia horrible que no es que pude olvidar y seguir adelante. Es algo que te deja hecha mierda y rompe un montón de cosas dentro tuyo”, dijo en ese posteo, y agregó: “No es un caso aislado. Dentro del colegio no es el primero y seguramente no será el último”. Hasta ahora, quienes conocen la trama dicen que no habría ocurrido acceso carnal y que la menor conocía a su agresor, al que incluso consideraba un “amigo”. Curiosamente, los integrantes del Centro de Estudiantes fueron los primeros en saberlo. Curiosamente, también fueron los primeros en callarlo.