Lo acuchillaron varias veces para sacarle un celular en Las Quintas

En un nuevo capítulo de la violencia desmedida que se vive a diario, esta vez un joven de 22 años fue apuñalado cuando le intentaban robar el celular, en Las Quintas. El episodio remite directamente a otros dos casos muy violentos, sucedidos el miércoles en zonas mucho más céntricas.

Esta vez, a la víctima la sorprendieron en 32 y 141 donde, según fuentes policiales, caminaba cuando era las 1.15 de ayer. Aparentemente iba solo cuando lo sorprendieron dos ladrones a pie.

Los delincuentes lo amenazaron para que entregara sus pertenencias. Más puntualmente, querían su celular. No trascendió si la víctima intentó defenderse, pero sí que los asaltantes “se tornaron muy violentos” en pleno episodio.

Así fue que uno de ellos sacó un arma blanca y se la clavó varias veces en el cuerpo. Además de lastimarlo, le sacó su teléfono. Los dos se escaparon rápido, hasta perderse en la oscuridad.

Dolorido y asustado, el joven al que le robaron se alejó también unos metros del lugar del robo, según trascendió. Los voceros policiales dijeron que la policía lo ubicó en 142 bis y 530, después de un llamado de auxilio que se hizo al 911.

Los agentes convocaron a una ambulancia del SAME, pero esa asistencia, al parecer, nunca llegó. “Dijeron que a esa hora y en ese ‘barrio hostil’ no podían entrar”, aseguraron las fuentes consultadas, mediante un informe al que accedió EL DIA.

Por esa circunstancia habría sido que al joven tuvieron que trasladarlo a un hospital por otros medios. Al parecer fue una mujer, testigo de la situación, la que se encargó de eso, se indicó.

Los agentes de la jurisdicción, por el momento, no capturaron a ningún sospechoso por este ataque.

violencia

El miércoles fue la antesala de este episodio, con dos casos que se le parecieron por la violencia que implicaron.

Uno fue en 8 y 50, en donde a un chico de 14 años le partieron la cabeza a golpes con un objeto contundente. Lo sorprendieron por la espalda, a las 2 de la tarde.

La víctima pretendió defenderse pero los ladrones lo castigaron salvajemente. Aunque ocurrió en un horario y en un lugar atestado, los delincuentes consiguieron escaparse a pie.

Otro caso salvaje se vivió cerca de las 3.30 de la madrugada de aquella jornada.

Lo sufrieron dos amigos: les robaron y a uno de ellos le pegaron un tiro, que le rozó la frente.

Todo sucedió en la esquina de las calles 14 y 54, a metros de la Catedral. A uno de los hombres le tiraron a quemarropa cuando huía asustado, pero no llegaron a herirlo.

Distinto fue el caso de un estudiante de Sistemas, de 32 años, al que le dispararon a la cabeza. El hombre atinó a correrse y, solamente por eso, la bala lo rozó.

“Les di todo, pero igual me dispararon. La vida de uno no vale nada para estas personas”, expresó la víctima.