Una fuerte polémica anticipó cambios en las designaciones del gabinete municipal

Luego de una fuerte polémica en torno a la posible designación de un joven que organizaciones políticas y de derechos humanos señalan como de haber celebrado consignas vinculadas al nazismo durante su adolescencia, el intendente, Julio Garro, concluyó ayer en negar esa posibilidad y adelantar la designación definitiva de un grupo de jóvenes militantes del PRO que ocuparán cargos políticos en la esfera de la Secretaría de Coordinación municipal, que conduce Oscar Negrelli.

Se trata de subsecretarías y direcciones que en el anterior organigrama estaban a cargo del ahora concejal Javier Mor Roig, y que ahora el jefe comunal otorgó al ala joven del macrismo local, que conduce directamente el presidente del Concejo Deliberante, Fernando Ponce.

En medio de este volumen que gana el titular del cuerpo deliberativo tras la exitosa campaña electoral del año pasado, una polémica atravesó las deliberaciones por esas designaciones y fue el rumor de que como secretario de la Juventud del municipio fuese designado Lautaro Grilli, un joven militante de 23 años que fue protagonista de confusos episodios durante su militancia como alumno en el normal Nº2, cuando, según lo acusan algunos sectores políticos y de derechos humanos, entre ellos la UCR local, habría manifestado una orientación cercana al “nazismo” y habría reivindicado la última dictadura militar.

Incluso, señalan organismos de derechos humanos y políticos, por sus reivindicaciones neonazis pesó sobre Grilli una denuncia penal por la que debió ser cambiado de escuela.

Por eso, ante la versión y la resistencia a ese nombramiento, ayer desde la Comuna desestimaron esa posibilidad afirmando que “nunca hubo algo oficial” respecto a designar a Grilli, y, en cambio, nombraron como secretaria de la Juventud a la hasta ahora secretaria de Ponce, Florencia Mele, de 23 años.

La secretaría de Mele estuvo ocupada hasta ahora por Agustín Scotti, otro joven que responde políticamente al presidente del Concejo y que ahora asumirá como subsecretario de Coordinación municipal, es decir, el segundo de Oscar Negrelli.

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Otro cargo importante en esa área nueva que reemplazó la antigua jefatura de Gabinete y Secretaría General, es el de la dirección de Seguimiento y Control de gestión, que estará a cargo de Bárbara Bahamonde, también poncista.

De la misma rama política y todos “puros” son los jóvenes militantes designados en las otras áreas que dependen de Coordinación y que no fueron eliminadas. Estas son Política de Género, que estará a cargo de Lucía Ríos, Relaciones Institucionales, a cargo de Martín Eliggi, Políticas de Derechos Humanos, que será dirigido por Emiliano Péres y Entidades y Culto, a cargo de María Victoria Peruggi.

Esta ola de militantes amarillos menores de 30 años obedece a la decisión política del Intendente de dar lugar a jóvenes que han trabajado en la última campaña electoral pero que también hace al menos cinco años forman parte del equipo del PRO La Plata, lo que políticamente algunos interpretan como una valoración al trabajo del presidente del Concejo en las últimas elecciones, dado que fue uno de los miembros de la mesa chica de campaña y organización.

Además, desde lo estructural, forma parte de la reducción política anunciada por el jefe comunal, dado que hasta ahora trascendió que en ese lugar se ocuparán ocho cargos en lugar de los once que dependían de la antigua Secretaría General.

Otro dato político que emerge de la decisión de Garro es que Mor Roig, quien el año pasado expresó en reiteradas ocasiones sus intenciones de presidir el Concejo Deliberante pero que finalmente quedó como un concejal raso, no conservará ninguno de estos cargos en la estructura del Ejecutivo, aunque, en esta conversación, aún no está todo dicho.