Azucena Guallama “Voy a tratar de restringir algunos gastos. La principal estrategia para hacerle frente a los aumentos que se viene va a ser comprar marcas más económicas en el supermercado, algo que empecé a hacer el año anterior y creo que seguiré haciendo este año”
Resignar salidas y otras formas de entretenimiento, restringir el uso de taxis o remises, optar con más frecuencia por segundas marcas. Estos hábitos de consumo que fueron instalándose en los últimos meses a medida que el peso de las tarifas crecía en el presupuesto hogareño tienden a consolidarse, según el testimonio de platenses consultados por este diario, frente a los aumentos de tarifas previstos para febrero.
Para Azucena Guallama, mamá de dos chicos de corta edad, Francisco y Nahuel, el comienzo del año se va a caracterizar en su casa por la cautela en el consumo.
“Estos aumentos se producen en un momento en que estoy sin trabajo, por lo que voy a tratar de restringir algunos gastos. La principal estrategia para hacerle frente a los aumentos que se viene va a ser comprar marcas más económicas en el supermercado, algo que empecé a hacer el año anterior y creo que seguiré haciendo este año”, dice.
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Para Julieta Menéndez (38), el aumento de los servicios va a redundar, en su economía doméstica, en una reducción de otros consumos, aquellos a los que pueda renunciar.
“Si bien vivo sola y no gasto mucho en servicios, lo cierto es que los aumentos repercuten en el rendimiento del sueldo. Ya el año pasado dejé de tener cable, porque tenía que recortar por algún lado. También salí menos y fui más selectiva en el supermercado, comprando segundas marcas en aquellos productos en los que la diferencia de precio con las primeras era muy notoria”, cuenta,
Otra de las estrategias a las que recurrió para hacer frente a los aumentos fue la de eliminar un celular.
“Tenía dos celulares y me quedé con uno, para eliminar gastos fijos y que el ingreso rinda un poco más”, expresó.
Para Sandra Cabrera “el aumento de los servicios se notó mucho el año pasado en el sueldo y con los nuevos aumentos se va a notar todavía más. Yo desde que se empezaron a reacomodar las tarifas cambié algunos hábitos de consumo. No en cosas como la comida, pero si en otros rubros como la perfumería y los artículos de limpieza, recurriendo a veces a segundas marcas”.
Para Beatriz Caminos, “en realidad no hay mucho que hacer. Se trata de defenderse con el mismo sueldo frente a los aumentos y pensar más antes de gastar”.
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