Lo hirieron a barretazos para meterse en su casa de Abasto y huyeron con un celular

Eran las 11 y media de la noche del martes cuando un hombre de 40 años -que alquila la casa en la que vive en una zona de quintas de Abasto- se preparaba para ir a dormir.

En medio de esos preparativos, se estremeció al escuchar ruidos extraños en la puerta de chapa de la vivienda. Antes de que fuera a investigar lo sobresaltaron otros más fuertes en un acceso trasero del inmueble.

Ahí Ulises Gastón Rey ya no tuvo dudas de que se trataba de delincuentes que pugnaban por meterse a robar en esa casa de 531 entre 207 y 208.

En un desesperado intento por contener el ingreso de los intrusos, sólo atinó a colocarse contra la puerta -que comunica a la cocina con la parte posterior del lote- mientras los ladrones rompían un vidrio de esa abertura con una barreta.

El hermano de la víctima cree que los ladrones suponían que en la casa había “mucha plata”

El hombre asaltado sufrió algunos cortes en la frente, debajo de un ojo y en una mano

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Fueron los peores momentos para la víctima, porque, según contó ayer a la tarde su hermano, Cristian (43), “con la misma barreta lo golpearon en la frente, donde le abrieron una herida de la que sangró bastante, y debajo del ojo derecho, causándole otro corte”.

Según el muchacho, a Ulises también “le lastimaron el dedo gordo de una mano”.

Una vez que consiguieron ganar el interior del domicilio, “uno de los ladrones se quedó con mi hermano y el otro se encargó de revisar toda la casa, seguramente en busca de dinero. Pero lo único que pudieron robarle fue el celular”, probablemente, especuló Cristian, “para que Ulises no llamara enseguida a la Policía”.

“Se quedaron cinco minutos, que para mí hermano fueron eternos”, acotó el muchacho.

Después de que los delincuentes escaparon la víctima pidió ayuda y un primo que vive en Abasto lo trasladó en su auto particular hasta el hospital de Melchor Romero.

En ese centro asistencial, informó Cristian, “le dieron entre cuatro y cinco puntos de sutura por la herida en la frente, tres puntos por el corte debajo del ojo derecho y también le suturaron la herida en la mano” que le provocó la caída de los vidrios.

Después de recibir asistencia, hacer la denuncia y recibir a los peritos de Policía Científica que analizaron la escena en busca de rastros, Rey se acostó para descansar.

sospechas

La cuadra donde se registró este caso de inseguridad presenta una escenografía de quintas y algunas pocas viviendas, entre ellas una que Ulises compró y está remodelando.

“Mi hermano se está haciendo esa casa con muchísimo esfuerzo y además le compró el terreno a un conocido, que le dio muchas facilidades para que lo pudiera pagar”, comentó Cristian, aclarando que la víctima “no es un hombre de dinero. Todo lo contrario, vive modestamente y se gana la vida haciendo un reparto de artículos de limpieza”.

Sin embargo, el muchacho sospecha que el ataque de las últimas horas no fue al voleo.

“Es probable que alguien de esta zona suponga que Ulises tiene dinero guardado en su casa para comprar materiales y por eso hayan organizaron el asalto, pero se equivocaron”, aseguró. Y reforzó su hipótesis al asegurar que “este barrio es súper tranquilo”.

Con los datos que aportó que el damnificado los policías salieron en busca de los violentos ladrones, pero el operativo se levantó sin resultados.

Se iniciaron actuaciones por “robo calificado y lesiones”, a cargo de la UFI 9 de Autores Ignorados.