El pico de los síntomas se da en los primeros 10 minutos
Edición Impresa | 23 de Diciembre de 2018 | 07:46

Por MARIANA HERRERO (*)
Suele escucharse coloquialmente que alguien “tiene ataques de pánico”, incluso que “se paniqueó”. La banalización de estos términos admite algunas aclaraciones para delimitar los alcances de las llamadas crisis de pánico y del trastorno de angustia. Cuando hablamos de la primera, nos referimos a episodios en los cuales surge repentinamente una fuerte sensación de miedo o malestar que puede incluir palpitaciones o taquicardia, sudoración, sensaciones de ahogo, náuseas, mareos, escalofríos o sofocaciones. Estos síntomas pueden variar en su intensidad, alcanzando su pico generalmente durante los primeros diez minutos, para luego ir mermando gradualmente, aunque en ocasiones el malestar se extienda por algún tiempo más. Acompañando estas sensaciones, suelen aparecer pensamientos del tipo: “estoy teniendo un infarto” o “me voy a volver loco”. Es importante tener en cuenta que las crisis de pánico se pueden presentar sin que la persona tenga un trastorno de base, pero también pueden concurrir dentro de varios trastornos psiquiátricos y clínicos.
(*) Psicóloga de la Clínica de Ansiedad del Departamento de Psicoterapia del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO)
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE