El adiós a Beatriz Capotosto, una atleta ejemplar

Edición Impresa

Mónica Regola (*)

regola2002@hotmail.com

Tristeza y desazón causó en la familia atlética y en la gente en general el sorpresivo fallecimiento de Beatriz Capotosto. Una de las mejores atletas que ha dado el país. Nacida en Berisso un 16 de mayo del 1962, inicio su excepcional carrera en el Centro Atlético de Berisso bajo las órdenes del inolvidable José Olmi Filgueira. Luego pasó al club Estudiantes con Jorge Martínez Poch (1978-83), para terminar en el ‘84 en River Plate. Beatriz (o Charito, como le gustaba le dijeran) fue campeona nacional de Menores cuatro veces, de Juveniles cinco y en mayores otras ocho.

Campeona sudamericana de Mayores, en tres oportunidades. Cuatro títulos de campeona sudamericana en Juveniles y dos títulos sudamericanos en Menores. Medalla de plata en el Iberoamericano de Barcelona. Fue representante argentina en los Juegos Panamericanos de 1979, 83 y 87, en los Juegos Olímpicos de 1984 en Los Angeles y en el Campeonato Mundial de Helsinki 1983.

Ese mismo año ‘83 fue Olimpia de Plata. Dueña de una condición física sin igual, lo que facilitó su paso también brillante por otros deportes impensados en esos tiempos para una mujer, jugó al fútbol y destacó también en el handball.

Querida por todos los que la conocieron, personaje singular y excelente amiga y compañera en todos los equipos que integró. Su partida a los 56 años dejó una congoja generalizada. Se fue antes de tiempo y no sabemos por qué... Tal vez Dios precisaba de la mejor vallista de Sudamérica en el cielo... Gracias Beatriz, por todo lo que nos diste.

(*) Profesora y ex múltiple campeona Master de atletismo.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE