Un granadino suelto en La Feliz

En una temporada de lo más variada, en Mar del Plata también hay lugar para la música española de la mano del granadino Ismael Rodríguez (28), quien, los sábados y domingos a las 21, ofrece su show “Coplas, embrujo y tronío”.

El espectáculo es un itinerario musical por el apasionante mundo de la canción y la poesía española, de ayer y de hoy, con el embrujo de Granada, tierra del cantante, al que acompaña un grupo de músicos marplatenses en vivo, que dan al show un auténtico brillo y señorío andaluz.

No es la primera vez que este joven, que saltó a la popularidad tras participar de un certamen televisivo de Granada, se presenta en Mar del Plata: había venido en 2016, gracias a las gestiones de un cura apasionado por la música española, que lo hizo regresar el año pasado y, ahora, gestionó todo para que pueda sumarse a la cartelera de verano, como parte de la programación oficial del Ministerio de Gestión Cultural.

Para Ismael, el “pequeñito lugar” en el que actúa los fines de semana es ideal porque genera la magia que sus ritmos necesitan para evocar su tierra natal.

Sobre el espectáculo, contó en diálogo con EL DÍA, que, acompañado por un piano, percusión y guitarra, va trayendo sonidos del viejo continente a la costa bonaerense.

“Empezamos con paso doble y vamos haciendo diferentes temas que todo el mundo más o menos conoce, como ‘Bien pagado’ o ‘Como yo te amo’; también tocamos la parte más melódica de la música española, con temas como ‘Te quiero te quiero’ de Nino Bravo, y terminamos con rumba, más festivo, más alegre, con canciones de la talla de ‘La luna y el toro’, por ejemplo”, explicó.

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Se trata de una propuesta interactiva, en la que el joven cantante invita a participar al público. “Siempre digo lo mismo: para mí ir al teatro es para divertirse y pasar un buen rato. Por eso intento generar en ellos esa sensación”, manifestó el carismático Ismael, en el lobby de un hotel marplatense en el que alzando la vista se puede observar el mar.

Sobre su origen en el mundo de la canción, dijo que fue “curioso” y de “casualidad”, y que hasta antes del certamen no se había dado cuenta del don que tenía en su voz.

“He sido un niño que no ha cantado nunca, ni con amigos ni en casa”, confesó Rodríguez, quien le contó a sus padres días antes de su decisión de entrar al programa “Copla” que se emitió por Canal Sur entre 2013 y 2014. “Hice el proceso de selección y tuve la suerte de salir elegido. Fue como de la noche a la mañana”, reveló, quien atravesó todas las etapas sin ningún obstáculo, con el apoyo del público.

“Finalmente, no gané, salí segundo, pero de todos modos me fue bien porque, ya me ves, hace cuatro años que estoy trabajando por su gracia”, remarcó.

Ismael, que además de cantante es diseñador de interiores y docente, aseguró que, de todos modos, no todo en su corta pero prometedora carrera desde que salió del programa fue “pum para arriba”.

En este sentido, dijo que las giras producidas por el canal fueron “desastrosas” aunque con el tiempo su nombre se fue instalando dentro del género. Ahora, es una figura reconocida y con gran popularidad en las redes sociales, lo que le permite, destacó, poder llenar los conciertos sin demasiados problemas.

Ahora, por caso, llegó a Mar del Plata después de una gira por diferentes lugares de España que ha incluido más de 30 shows sold out. “Estoy desde junio sin parar, sin pisar mi casa”, contó el joven artista que cada vez que sube al escenario deja la timidez de lado para convertirse en todo un showman con su metro sesenta y seis de estatura.

“Soy muy persona en el escenario, me gusta tener cercanía con el público, hablar con ellos, interactuar de forma normal, de vez en cuando soltar alguna cosita para que se rían, que entren en contacto, que no se de la frialdad del artista inaccesible”, consideró, quien, además, en cada gala musical, cuida hasta el mínimo detalle la presencia, con elegantes trajes hechas a medida por un prestigioso sastre español.

“Creo que espectáculo lleva muchas cosas, de hecho, la voz, para mí vale como un 20%. Hay muchos cantantes que tienen grandes voces pero poca elegancia; hay muchos factores, la luz, el sonido y otros detalles que forman el conjunto escénico”, opinó.

Sobre su futuro, manifestó que le encantaría poder seguir dedicándose a la canción aunque si no se da no se va a frustrar. “Me gusta la docencia, me gusta estar en el colegio con los niños, de hecho estuve un año ejerciendo y disfrutaba mucho con ellos. Ojalá algún día pudiese compaginar las dos cosas pero sé que es difícil sobre todo porque si tienes conciertos a mitad de la semana sería muy complicado, porque no me gusta dejar a los niños colgando constantemente. Si empiezas con ellos un curso, tienes que terminarlo porque es un proceso de aprendizaje, se tienen que adaptar”, reflexionó.

Apenas terminada la temporada en Mar del Plata, Ismael realizará una pequeña gira por Buenos Aires, y luego volverá a España, en donde ya tiene varios shows cerrados. De momento, disfruta de los shows que ofrece los viernes y sábados en la Bodega del Teatro Auditorium, a las 21, acompañado por los músicos Alejandro Benítez en guitarra flamenca, Horacio Soria en piano, y Martín Paigé en percusión flamenca.