“Una mujer fantástica”: el amor se bate a duelo contra el mundo

Cuando “Una mujer fantástica” era aplaudida de pie en los festivales del mundo (fue premiada con el Oso de Plata al mejor guión de la pasada Berlinale y enamoró en Mar del Plata), el corazón del filme, la actriz Daniela Vega, comenzó a sonar como, potencialmente, la primera mujer trans en ser nominada a un Óscar como mejor actriz. La nominación finalmente no llegó para la actriz y cantante chilena, pero Vega igual hará historia al convertirse en la primera mujer transexual en presentar una terna en la próxima ceremonia de los Premios de la Academia.

Será un “broche de oro” para una performance contenida, emocionante y desgarradora en una de las cintas más sentidas de la temporada pasada, que se estrena este jueves en los cines locales, días antes de optar por el galardón a mejor cinta extranjera en la ceremonia número 90 de los Óscar junto a “The Insult” (Líbano, se estrena el 29 de marzo), “Loveless” (Rusia), “On Body and Soul” (Hungría, puede verse en Netflix) y “The Square” (Suecia).

“Una mujer fantástica”, del cineasta chileno nacido en Mendoza Sebastián Lelio, cuenta la historia de Marina (Vega), una cantante lírica trans que llega a fin de mes gracias a su sueldo de mesera y que vive con Orlando, un hombre mayor de clase alta que dejó a su familia “tradicional” tras enamorarse perdidamente de esta camarera.

Pero una noche, luego de celebrar el cumpleaños de Marina, Orlando se descompone: ella lo lleva a la sala de emergencias, pero él muere justo después de haber llegado. En lugar de permitirle llorar a su amante, la vida de Marina se llena de sospechas: de los médicos, de la familia de Orlando e incluso por una mujer detective que investiga si ella estuvo involucrada en su muerte.

Todos la resienten y sus miradas juiciosas se tornan hostigadoras y violentas: las sospechas existen y lo material incide (ella ocupa el departamento de Orlando, usa su auto), pero el guión de Lelio se encarga de dejar en claro que el eje de la problemática no es la causa de muerte, o el dinero, sino el prejuicio: para gran parte de la familia de Orlando su identidad sexual es una aberración, una vergüenza para la familia que intenta tapar ese idilio de Orlando con Marina. La fantástica Marina deberá “sobrevivir”, como reza la canción, resistir mientras la echan del departamento que compartían, le vedan el ingreso a su funeral y otras violencias.

HISTORIA DE MARINA

Vega ingresó al proyecto convocada por Lelio como una consultora: la cantante tenía ya experiencias en cine, pero el cineasta quería darle volumen a su personaje y fue por eso la llamó. “Yo le contaba a Sebastián acerca del mundo trans, de la literatura, de los personajes, de la gente, y mi propia visión de vida, del género, de la masculinidad y la femineidad. Y un día, cerca de fin de año, me envió un guión a mi casa: ahí me enteré de que el protagonista no era Orlando, sino Marina, y que él quería que yo fuese la protagonista de la película”, contó la actriz.

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El desafío era profundo, porque Marina representaba un desafío interpretativo, una mujer que, a diferencia de la propia Vega, locuaz y abierta, “habla lo justo, con los ojos”. “Pero acepté este papel porque era un desafío, y me gustan los desafíos”, dijo Vega en diálogo con EL DIA, quien, además, se ha enamorado del cine, al que ingresó en 2014 con su protagónico en “La visita”, porque “el cariño a veces se nos priva, y el cine conecta a las personas. A pesar de que hay algunos que intentan construir muros, con esas piedras otros intentamos construir puentes comunicantes”.

UNA fábula DE AMOR

Arte y militancia son así para Vega una misma cosa, ideal que se vuelve carne en Marina: “Una mujer fantástica”, opinó, ayuda a “expandir los límites del pensamiento”, provoca en los espectadores “pensar y repensar qué hacer para cuestionarse aún más esas cosas que nos entregaron como un mandato cuando éramos chicos”, por lo cual siente regocijo por el recorrido que está realizando la película, que comenzó en Chile, donde “estuvimos tres meses en cartelera, lo cual para la industria nacional es bastante tiempo: generalmente las películas “gringas” se quedan todo ese tiempo en cartelera”.

“La película busca cuestionar esos espacios de moralidad, y hacerse la pregunta de qué cuerpos se pueden habitar y qué cuerpos no se pueden habitar, qué amores se pueden vivir y qué amores no se pueden vivir, y quién dijo que esos cuerpos no se pueden habitar, o que esos amores eran inconcebibles. La película es una gran pregunta: ¿qué estamos haciendo con la empatía? ¿Por qué a algunas personas se les niega el amor por sentir diversamente?”, se preguntó la actriz, para concluir que “yo no conozco a nadie que sea igual a otro: y de eso me enamoro, de que son distintos a mi. Si no sería como estar con un espejo”.

Pero la historia de “Una mujer fantástica” conmueve porque supera los límites de una “película de temática trans” para convertirse en una historia de amor contra todo obstáculo (incluso la muerte), una característica que la une a otro de los estrenos de esta semana, “Llámame por tu nombre” (que irá por el Óscar a mejor película). Y es en ese sentido que Vega opinó que la cinta de Lelio, que se prepara para estrenar este año su primera cinta en Hollywood, “Disobedience”, invita “a preguntarnos de qué manera estamos administrando el tiempo. Una de las cosas que más me importan como artista es cuestionarme el tiempo: qué hago con el tiempo que me pertenece, de qué manera lo administro. Y es de allí que se desprenden todos los otros cuestionamientos, como el amor, la familia, la corporalidad o la moral.”

El problema de la familia de la pareja de Marina no es la causa de muerte sino el prejuicio

“Una mujer fantástica” optará por el Premio de la Academia a mejor cinta extranjera