Opinan los lectores

MÁS ES MENOS

Javier A. Rodríguez dice: “La mayoría de los presidentes del mundo podrían ser espiados entre otros elementos, mediante datos que utilizarían por “servicios” electrónicos o telefónicos, y sin embargo al mismo tiempo que se implementarían mayores transparencias para las pertenencias materiales, también algunos seres, administrarían aumentadas cantidades casi ilógicas, incomprensibles o ilegales, y si países alejados podrían saber sobre algunas circunstancias manejadas por Argentina, entonces todos los argentinos también deberían conocer. En fin por otra parte, justo una de las instituciones más importantes del país, (debería tener “edificios de oro” por ejemplo) resulta que para abaratar costos, se inclinaría por un futuro con menor cantidad de papel, y además aparentemente, con la reducción de otros empleos relacionados supuestamente ya innecesarios que ello conllevaría. En definitiva, cuando ciertos organismos del Estado se inclinarían por “copiar” determinadas ideas como lo de las facturas electrónicas, además convendría imitar en cuestiones semejantes a las clasificaciones en juegos olímpicos, mecanismos de defensa del país, alimentación o posibles uniones con países aparentemente hermanos. Finalmente quizás, cada lugar tendría culturas con ideas propias para el, y aunque habría una mitad de los habitantes apoyando las invenciones, también convendría respetar a la otra parte, pues encima en ocasiones, ciertos papeles podrían tener mayor duración que algunas otras nuevas herramientas tecnológicas.”