El “clan Benítez” se negó a declarar y ya aparecieron nuevas víctimas

La mujer y sus dos hijos de 24 y 26 años que habían sido detenidos en la ciudad de Bahía Blanca acusados de torturar y abusar sexualmente de dos mujeres en su casa durante varios meses, se negaron a declarar ayer ante el fiscal de la causa y permanecerán detenidos, aunque su situación procesal podría complicarse todavía más con los testimonios de otras víctimas que habrían padecido vejámenes parecidos en los últimas 5 años.

Por lo pronto, María Esther Llanos (65) y sus hijos Fernando Rubén (26) y Gonzalo Leonardo Benítez (24) guardaron silencio frente al fiscal Marcelo Romero Jardín. Según los investigadores, el funcionario analizaba la posibilidad de recibir en las próximas horas el testimonio de las dos víctimas del hecho, aunque todo dependerá de la evolución de las mismas.

Una de ellas, de 18 años, pasará en las próximas horas a una sala común. El jefe de la unidad de Terapia Intensiva del hospital, Edgardo Ibáñez, indicó que la paciente “está lucida y se repitió una tomografía de un hematoma en el cráneo en donde evolucionó favorablemente”, por lo que está en condiciones de salir de ese área.

“Continuará con las curaciones de las heridas que tiene en su cuerpo, como en las piernas donde tenía mordeduras más severas”, agregó Ibáñez. La otra víctima, de 23 años, también está en terapia intensiva “y se evalúa si será sometida a diálisis por una insuficiencia renal”.

Los hechos salieron a la luz el lunes, cuando la chica de 18 años logró escapar de la vivienda de la familia Benítez, en Güemes al 3700, y se dirigió a la casa de su madre. Antes de perder conocimiento, indicó el lugar de cautiverio y el nombre del captor, Fernando Benítez, por lo que se dispuso un allanamiento. Hallaron a la otra víctima tirada en el patio de la vivienda. Con el paso de las horas se conocieron otros casos de mujeres que fueron víctimas del clan Benítez, en esa casa del horror situada en el barrio Latino de Bahía Blanca.

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