El fracaso fue total, de una punta a la otra

Tan por debajo de las necesidades fue el rendimiento individual de anoche en el equipo de Estudiantes, que los más destacados terminaron siendo Rodrigo Braña y Juan Otero, que entraron por una lesión de Lucas Rodríguez en el primer tiempo y por Juan Bautista Cejas para el reinicio, respectivamente.

El Chapu, que de este modo reapareció, se encargó de patrullar la franja central, donde reinó el desorden, y en lo posible clarificó y aseguró las entregas; mientras que el colombiano, a pesar de imponer su velocidad, se mostró muy equivocado en la definición.

En lo que tiene que ver con los titulares, quienes empezaron el partido, terminaron siendo un compendio de equivocaciones. Empezando por Daniel Sappa, el arquero, que se mostró desatento en la jugada que abrió el partido, y finalizando por Mariano Pavone, el jugador más adelantado que debió arreglárselas prácticamente sin compañía alguna.

Nadie zafó de la crítica, absolutamente ninguno.