Kane los salvó del incendio

La renovada Inglaterra de Gareth Southgate se presentó en Rusia 2018 con el objetivo de poner fin a una racha de casi ocho años sin ganar en una Copa del Mundo y lo logró.

Con un triunfo 2-1 ante Túnez se sacó de encima la presión en un partido que finalmente fue más difícil de lo que parecía. Los europeos lograron ganar 2-1 gracias al doblete de Harry Kane, quien marcó un tanto en el tiempo adicionado.

A los dos minutos los ingleses tuvieron la primera situación en los pies de Jesse Lingard, quien aprovechó un error de la defensa africana en el área y capturó el balón, pero su remate lo desvió el arquero Mouez Hassen. Un minuto más tarde, Lingard llegó hasta el fondo por el sector izquierdo del ataque y lanzó un pase perfecto para Raheem Sterling, pero el hombre del Manchester City se tropezó y no pude darle al balón con precisión.

manejó el partido

Inglaterra manejó el desarrollo, a través de Lingard y Delle Alli, y la insistencia tuvo rápidamente su premio, tras un cabezazo sin marca de John Stones que sacó Hassen en el ángulo superior izquierdo pero el rebote encontró a Kane, que ya sin oposición definió con un toque suave.

Poco después y también por el mismo palo lo tuvo el propio Lingard, pero definió en forma defectuosa.

Luego de los 25 minutos iniciales Túnez pudo salir un poco del asedio y respondió con un disparo desde afuera del área de Ferjani Sassi que se desvió al tiro de esquina.

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Pero a los 35 minutos Kyle Walker le dio un codazo a Fakhereddin Ben Youssef adentro del área y Sassi transformó el penal en gol con un remate bajo que se metió junto al palo derecho de Jordan Pickford, que alcanzó a tocarla pero no pudo desviarla.

Despertó Inglaterra tras el impacto y llegó varias veces al área rival, como un remate de Lingard desde el punto de penal que se desvió al córner y otro envío del mismo jugador que dio en el palo izquierdo del ingresado Ben Mustapha.

túnez tuvo la pelota

En el inicio del complemento Túnez se animó a tener algo más la pelota, y no obstante la primera de riesgo fue para Inglaterra, con un cabezazo de Alli que contuvo Mustapha abajo.

Sin embargo, los africanos, ingenuos en algunos aspectos, tuvieron dos situaciones favorables, que no terminaron en gol por esas cosas de la suerte. Siempre se mostró firme en la recuperación, aunque algo impreciso a la hora de las entregas. Por eso, no tuvo profundidad en los metros finales.

El conjunto inglés, no obstante, tuvo posesión pero no fue tan profundo como en la primera mitad, pero se acercó al promediar la etapa con un tiro libre de Kieran Tripper desviado y otro tiro libre de Ashley Young apenas elevado.

Túnez quería que los minutos pasaran rápido para poder aferrarse al empate que jamás llegaría.

Al no se punzante de tres cuartos de cancha hacia adelante, se abroqueló en el fondo con mucha gente, buscando contrarrestar cualquier intento de los ingleses.

Sin embargo, y cuando el partido estaba terminando, Kane, el goleador del Tottenham, apareció por el segundo palo y batió de cabeza a Mustapha, para llevar a Inglaterra a un agónico triunfo, después de ocho años. Como dicen en la jerga, dos cabezazos dentro del área por lo general terminan en gol. Y así fue como el equipo inglés terminó por imponerse a los africanos.