“Devoto”: más cine de género hecho en La Plata
Edición Impresa | 1 de Julio de 2018 | 04:14

Consolidándose como usina cinematográfica de producciones de género, La Plata fue el escenario donde, hasta la semana pasada, se rodó “Devoto”, la nueva película del director local Martín Basterretche, una historia de aventuras sobre una estructura de género fantástico.
Producida por Clase B y Sonósfera, se trata de la segunda entrega de la trilogía Santa Sofía del Mar, ciudad ficticia en la cual transcurren las historias, que comenzó con “Punto Ciego”, ópera prima de Basterretche, y que espera poder cerrar con una nueva producción más adelante.
Con guión de Fernando Regueira, “Devoto” cuenta la historia de cinco extraños que despiertan encerrados en un edificio enorme y siniestro. No saben quién los trajo ni con qué fin. A lo largo de la noche, van a descubrir con sorpresa que afuera hay una invasión y que al parecer ellos fueron elegidos para intentar detenerla.
Alexia Moyano, Gastón Cocchiarale, Jorge Takashima, Luis Longhi, Denisse Van der Ploeg y Julián Marcove integran el heterogéneo elenco de “Devoto”, protagonizada por Diego Cremonesi, el ascendente actor local que acaba de ganar el Martín Fierro a la revelación actoral por su trabajo en “Un gallo para Esculapio” (Telefé).
“Lo mío es muy imparcial pero para mí Diego es uno de los mejores actores de cine jóvenes con los que contamos. Hay pocas personas que ya tengan la experiencia que él tiene frente al oficio concreto de actuar para la cámara, y además me parece que él tiene una suma de registros, puede ser muy clásico y también más moderno, puede alcanzar esa tridimensión que a veces queremos de los personajes”, elogió Basterretche al intérprete que se ganó el cariño de los platenses con su divertido Paco de Los Rimenver y que llegó a actuar en exitosas producciones del cine (“Invisible”, “Kryptonita”, “Penumbra”, “Sudor frío”,“Gilda”, “La afinadora de árboles”, “El Potro”) y de televisión (“Nafta Súper”, “El Marginal”, entre otras).
Basterretche, que después de su debut con aquel policial negro que incluyó la actuación de Álvaro Teruel (Los Nocheros) realizó el documental “Consejos para seguir bailando”, asegura que “todo arte es una artesanía, por lo tanto es un oficio y hay que saber hacerlo”. En este sentido, toda la experiencia recogida detrás de cámara hasta el momento, más toda la que cosechó en sus facetas como guionista y productor, lo lleva ahora, con “Devoto”, a sentirse más seguro detrás de cámara, entendiendo que “más allá del interés artístico, hay algo que está en la manera, y eso lo da la práctica”.
Entusiasmado con este proyecto, listo para entrar en la etapa de post producción y que planea estrenar en salas comerciales el año próximo luego de recorrer el siempre bienvenido circuito de festivales y recorridos alternativos, remarca el cineasta el hecho de haber podido “ traer una producción entera a la Ciudad, generar trabajo, y cierto movimiento, que siempre es positivo”. De todos modos, destaca que, como platense, “siempre consideré que en La Plata hay escenarios fabulosos para crear ficción, y que están menos vistos que otros lugares tan reconocibles de Buenos Aires”. También reconoció el trabajo de todo el equipo que formó parte del rodaje, muchos, también locales.
INSPIRACIONES
El cine clásico argentino, algunos directores norteamericanos de los 70 y 80 y cierta literatura de ciencia ficción de los años cincuenta del país del norte fueron inspiración natural para Basterretche -gran consumidor de este rubro- a la hora de imaginar y plasmar “Devoto”, una producción enmarcada en el cine de género, a su entender, “la base sobre la cual se construye la narración cinematográfica, y el punto de partida sobre el cual se puede, a su vez, construir lo más importante: la metáfora, el sentido y la visión del mundo”.
Según explica, “el cine de género además de tener esa cualidad, tiene la cualidad de la conexión inmediata con el espectador, hay que tender puentes con el espectador para poder construir sentido; y no supongamos que el sentido está en lo críptico de la obra moderna porque en ese sentido, y eso es lo que me parece más interesante, el cine sigue siendo clásico, sigue siendo vivo a la vez”.
Consultado en relación a las libertades de trabajar en este tipo de cine, confiesa que, en principio, “exige más rigor en su construcción” y que luego, a la larga, “es más libre en el sentido de que tiene posibilidades de significación y de profundidad mucho mayores, porque está apoyado en una estructura, como todo arte clásico”.
Para Basterretche, que asegura que con su equipo de trabajo “nos sentimos más cómodos en la aventura que en el confort y quizá por eso hacemos cine en estas condiciones tan adversas”, el principal objetivo de este proyecto es, como todo cineasta, que la gente se de la oportunidad de verla.
“Es una película de género fantástico que por lo general tiene público de nicho, específico. En Argentina es así y viene creciendo muchísimo. Y en el último tiempo, a su vez, las películas de este género, se han vuelto muy populares porque han subido mucho su calidad”, sostiene el cineasta, quien, sin preámbulos, cierra optimista con un anhelo personal y profesional que persigue con su filme: “Deseo formar parte de ese grupo: del grupo de películas que las ve mucha gente”.
“El cine, como todo arte, es una artesanía, por lo tanto es un oficio y hay que saber hacerlo”
Martín Basterretche, Cineasta
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE