¡Hacé lo que quieras!

Un mediodía de furia fue lo que tuvieron que presenciar varios vecinos de la zona del barrio La Emilia, de City Bell, en un hecho inusual, según calificaron dos agentes de Control Urbano que intervinieron ante el reclamo de la gente cuando vieron que un vecino manejando maquinaria vial sacó una montaña de basura, tierra, ramas y piedras de un lote ubicado en 133 bis entre 469 y 470 y lo trasladó unos 100 metros a la vuelta de esa ubicación, para dejarlo en el frente de otra casa.

Los vecinos, que hicieron la denuncia en Control Urbano, contaron que intentaron frenar al hombre pero que este contestó de manera muy agresiva y, lejos de frenar, encaró con todo para seguir adelante con su atropello. Es que luego encaró varias veces desde la esquina de calle 469 y 133 bis hacia la 134, armando a mitad de cuadra una montaña de basura, tierra, ropa vieja, piedras y ramas de más de un metro de alto por unos 3 metros de diámetro, con el que además tapó una zanja abierta.

Control Urbano labró un acta. Ahora los arreglos los tiene que hacer la delegación local

En su carrera, que cada vez era a mayor velocidad y en la que tomó esa media cuadra unas tres o cuatro ocasiones, empujó todo lo que había –además de la basura que arrastraba desde el lote- y levantó toda la base de esa calle, que es de tierra pero había sido mejorada por los frentistas, dejándola llena de irregularidades, huellas y pozos, según relataron los vecinos a este diario.

Según se supo, Control Urbano labró un acta y le informó a los vecinos que ahora debían pedirle al delegado de City Bell que envíe un camión para levantar esa basura, pero hasta el cierre de esta edición el estado de la calle rota y de la montaña de basura no se había modificado, es decir, nadie de la Delegación se acercó a subsanar el estropicio que realizó el conductor de la máquina, que vive en esa cuadra, según constataron los agentes municipales.

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El daño que alcanzó a la calle 469, de tierra en ese tramo, lo realizó con una máquina tipo retroexcavadora con la que el conductor –fuera de sí según los vecinos- sacó una capa de unos 20 centímetros de tierra y tosca y dejó a la arteria sin base, con lo que creen que ahora volverá a convertirse en un lodazal cuando llueva, como pasaba hace años atrás.

Además, agregaron que después del insólito hecho en el lote del que sacaron la basura se iniciaron trabajos en una obra ilegal, ya que no cuenta con ningún cartel identificatorio ni que lo habilite, según confirmó un grupo de vecinos a este diario, que prefirió no identificarse por temor a represalias.