Opinan los lectores

UNA LECCIÓN DE HONRADEZ

Germán Foglia, dice: “Tuve el privilegio de conocer a Chichina Zurita. Y voy a contar una anécdota que me dio una lección de vida. Ella era la contadora Ad honoren de una institución prestigiosa de La Plata. Cuando se disolvió la organización y se liquidaron los activos, además de venderse la propiedad, me explicó que ella luchó efusivamente para que todo fuese en un minucioso orden. Es así, que había quedado un dinero a favor, debido a su gran labor. Y ahí le dije por qué no aprovechaba para beneficio propio, ya que se lo merecía. A lo que ella me dio una lección de moralidad ejemplar. Rindió cuenta hasta el último centavo. Y así fue: un ejemplo. Y ese ejemplo se contagió a cada uno de sus descendientes”.